¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
MENSAJE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO A SU AMADA HIJA LUZ DE MARÍA
SOLEMNIDAD DE JESÚS DE LA DIVINA MISERICORDIA
19 DE ABRIL DEL 2020
El hombre verá levantarse otra guerra armamentista
Encontrándome en oración, nuestro Amado Jesús me ha hablado:
“¡SOY DIOS DE CIELOS Y TIERRA!
¡AMO A TODAS LAS CRIATURAS HUMANAS!
Me causa tanto dolor cada pecador que cae una y otra vez sin escatimar en sus ofensas.
YO ME ENCUENTRO DISPUESTO A PERDONAR A CADA CRIATURA HUMANA QUE SE ACERQUE A CONFESAR SUS PECADOS, ARREPENTIDA TOTALMENTE Y CON DESEO ARDIENTE DE NO VOLVER A CAER.
En la humanidad, encuentro hijos Míos que desean regresar a Mi lado y Yo Me invado de Amor y felicidad, y ante el arrepentimiento, les miro ante Mí como la primera vez que se hicieron presentes ante Mí (Cfr. Lc 15,11-32).
Aún en este momento en que la humanidad se encuentra desolada, temerosa y enferma, escucho proferir grandes ofensas hacia Mí, grandes desprecios hacia Mi Madre y le cerraron los Templos a Mi Pueblo, ¡OH…!, ¡QUÉ DOLOR! (Cfr. Miq 6,3-8).
Por ello llamo a Mi Pueblo fiel, a cada uno para que testimonien el Amor hacia Mí, en su obrar y actuar hacia sus hermanos, con el corazón libre de resentimiento y amarguras causadas por negar el perdón (Cfr. Lc 15, 11,25; Mt 6,14-15).
¿QUIÉN ES EL HOMBRE PARA NO PERDONAR?
Pobres criaturas humanas las que no perdonan, se saturan el corazón de amargura y son presa de la confusión y la envidia. ¡Oh!, ¡cómo padezco por estas almas que no se acercan con corazón contrito y humillado ante Mí en el Sacramento de la Confesión!, y en su lugar, se alejan de Mí.
Les invito a mantenerse en Mi Amor, en donde no encontrarán detentes, ni juzgamientos, ni desprecios, ni amarguras. Les invito a ser Mi mismo Amor, para que Mi Misericordia no encuentre detentes, y así, ESTE MOMENTO EN QUE INICIÓ EL CAMBIO PARA LA HUMANIDAD, EL CAMBIO HACIA LAS PRUEBAS Y CALAMIDADES, SEA SOBRELLEVADO CON FE EN MI ESPÍRITU SANTO que les dará la gracia de la perseverancia y del Amor hacia Mí para que no queden en el camino, si son dignos de tales gracias, al obrar y actuar en Mi Voluntad Divina.
Mis hijos beberán el cáliz de sus propios pecados, siendo estos instantes de padecer a raíz de los grandes errores a los que esta generación se ha abierto. Y es la tierra de Santa Fe de la Vera Cruz la que será grandemente probada.
Oren por esta ciudad de Argentina, padecer que se extenderá por la Argentina con lamento y gran tristeza. (1)
Oren hijos Míos por Mi Tierra en donde prediqué Y FUI LLEVADO A LA MUERTE DE CRUZ, será motivo de ataques.
Oren hijos por la tierra de Santa Cruz en Brasil. Padece.
Oren hijos, la guerra pasiva se esclarecerá ante la humanidad y el hombre verá levantarse otra guerra armamentista.
Oren, que el Acto de Mi Misericordia se encuentra cerca de la humanidad, y tienen que mantenerse en Fe, para que luego del Aviso (2) Mis Ángeles que se mantienen en la Tierra, lleven almas fieles a Mí a dónde predicar y en donde sean necesarios para alentar a Mis fieles.
LA ORACIÓN ES FORTALEZA PARA MI PUEBLO Y LA COMUNIÓN DE MI CUERPO Y SANGRE ES LA UNCIÓN DIARIA PARA QUIENES ME RECIBEN.
En este instante en que han cerrado Mis templos, triste presagio de lo venidero, Mi Pueblo no se debe angustiar y perderse, sino deben fortalecerse con las Comuniones anteriores y esperar con paciencia. LUEGO SE DARÁ LA SEGUNDA EFUSIÓN DE MI ESPÍRITU SANTO, justo después del Aviso, a Mis justos y fieles para que sean aliento para sus hermanos.
Mi Misericordia no olvida las necesidades de Mi Pueblo y Mi Santo Espíritu y Mis Santos Arcángeles y Ángeles no dejarán a Mi Pueblo solo.
Les amo Pueblo Mío, les bendigo.
¡NO TEMAN HIJOS!
¡CONFÍEN EN MI MISERICORDIA QUE ES INFINITA!
JESÚS, EN TI CONFÍO.
JESÚS, EN TI CONFÍO.
JESÚS, EN TI CONFÍO.
Su Jesús.”
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
(1) Profecías sobre Argentina leer…
(2) Revelaciones sobre el Gran Aviso a la humanidad leer…
Fuente: Revelaciones Marianas








“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."