
(AG1521) Haz la Señal de la Cruz y lee todo sin prisa
§1: La guerra se acerca
§2: ¿Cómo podéis prepararos?
§3: No os abandonaré en este tumulto venidero
§1
La paz mundial está llegando a su fin, sí, la guerra se acerca. Primero vendrá del Este, luego se extenderá, encendiendo países que serán invadidos por inmigrantes y matones.
Estos países serán los que hayan abierto sus puertas de par en par a las multitudes de otros lugares, y lo que no deberían haber hecho, lo han hecho: aceptarlos, ayudarlos económicamente y darles lugares donde quedarse. Lo que han hecho, sin pedir nada a cambio, ha hecho creer a estos pobres incultos que todo estaba en juego y que tenían derecho a hacerlo de cualquier manera.
Estas bolsas de pobres esparcidas por todo el país se sublevarán fácilmente en tiempos de inseguridad nacional y, cuando llegue la guerra, sumarán su revuelta a la inestabilidad general. Esto sucederá pronto y vosotros, hijos Míos, haréis bien en prepararos para ello.
§2
¿Cómo podéis prepararos?
Con algunas provisiones, con agua bendita y agua milagrosa, con oración y confianza en Dios.
Sed caritativos con vuestros vecinos y, si es posible, procurad no dejar solos a los mayores de vuestras familias. Si podéis reuniros en familia, la solidaridad entre vosotros os ayudará y os animará.
Sed serenos y generosos, no os quejéis y manteneos unidos en torno al centro religioso de vuestra localidad. Tened en casa un lugar de oración donde toda la familia pueda reunirse todos los días; la fuerza de rezar juntos hará de vosotros lo que Dios quiere que seáis: generosos, caritativos, entregados y responsables. Os daré Mis gracias, no os abandonaré.
Yo soy vuestro Señor y sabéis que Dios cuidará de los suyos. Nadie será abandonado entre vosotros, y los que sean llamados a dejar la tierra, como sucede en tiempos de guerra, si son fieles a Su Maestro y Señor, Yo los acogeré en Mi Morada divina.
§3
No os angustiéis, el futuro es siempre desconocido para los hombres y si levanto ligeramente el velo, es para ayudaros como siempre os lo he prometido.
He predicho la enfermedad, la guerra, el hambre y la hambruna, y luego la gran prueba de la fe; esta prueba será el preludio del Aviso y el Gran Milagro vendrá algún tiempo después.
Luego vendrá un tiempo de gran agitación, porque la tierra misma se pondrá patas arriba, y será escenario de terremotos, volcanes y maremotos.
Seguirá un gran número de muertes, pero la Providencia divina gobernará este estado de cosas y el despertar de la naturaleza será el primer fruto de la renovación de la tierra y de la restauración querida y deseada por Dios desde la caída del primer hombre y de la primera mujer.
No os abandonaré, Mis queridos hijos, en este tumulto venidero.
Habrá luto, martirio y víctimas, pero siempre estará la Divina Providencia para todos y cada uno de vosotros. Mantened, pues, la paz en vuestras almas y en vuestros corazones, porque Yo os amo, os protejo y os guío.
Que la Paz Divina esté en vuestros corazones y en vuestras almas y no os dejéis sorprender por nada. Todo está bajo Mi gobierno aunque os lo imaginéis de otra manera.
Os amo absolutamente, os quiero en Mi Morada divina al final de vuestros días terrenales y esa es vuestra meta, vuestro propósito.
Amadme a cambio y en cuanto a Mis apóstoles y discípulos que no dudaron en entregarse en cuerpo y alma a su misión, os espero y os amo.
Fuente: srbeghe.blog