¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
Diciembre 07 2019
Llamado de San Miguel al Pueblo de Dios.
Mensaje a Enoch.
Ya estáis entrando en días de gran agitación y tribulación
¿Quién como Dios? ¡Nadie como Dios!
“Pueblo de Dios, la Paz del Altísimo esté con todos vosotros y mi Intercesión y Protección, os acompañe siempre.
Simiente de mi Padre, ya estáis entrando en días de gran agitación y tribulación; permaneced firmes en la fe, para que nada ni nadie os robe la paz. La lucha espiritual cada día será más fuerte, los ataques en la mente no os darán tregua; por eso debéis de estar bien fortalecidos espiritualmente, llevando puesta a todo instante vuestra Armadura Espiritual y fortaleciéndoos con el Cuerpo y la Sangre del Amado Cordero de Dios.
Hermanos, las persecuciones contra el Pueblo de Dios van en aumento, especialmente contra la Iglesia de Cristo; millones de cristianos y católicos, diariamente son perseguidos, encarcelados, torturados o desaparecidos en muchas naciones; los demonios encarnados quieren impedir por todos los medios que los cristianos y católicos, vayan en aumento. Conocen del poder de la Iglesia de Cristo cuando reza unida que hace estremecer los infiernos. En muchas naciones donde profesan otras religiones, ser cristiano o católico es ya un delito y se está impidiendo la celebración del Santo Sacrificio.
¡Pueblo de Dios, ni un paso atrás, adelante con vuestra fe; que nada ni nadie os aparte del Amor de Dios! El Cielo está con vosotros, pedid mi Intercesión y la de mis hermanos los Arcángeles y Ángeles y gustosos vendremos en vuestro auxilio. Haced mi Exorcismo y las súplicas ardientes a los Ángeles, para que derrotéis esas fuerzas malignas que se están levantando contra la Iglesia de Cristo aquí en la tierra. El poder de mi Exorcismo los expulsará y las súplicas a los Ángeles mis hermanos, os protegerán en todos vuestros caminos y batallas espirituales.
Después del rezo del Santo Rosario, haced mi Exorcismo y la súplica ardiente a los Ángeles, porque estas son poderosas Armaduras para combatir los demonios y hacerlos huir en desbandada. Acordaos que estáis ya en batalla espiritual y no podéis bajar la guardia con la oración, porque los demonios andan sueltos por el mundo, buscando la forma de robaros la paz y el alma. Os regalo hermanos esta oración a mi Espada para que la hagáis a mañana y noche y así permanezcáis protegidos de toda acechanza y dardo incendiario del maligno.

ORACIÓN A LA ESPADA DE SAN MIGUEL ARCÁNGEL
¡Oh Espada Gloriosa dada a Miguel Arcángel, por el Padre Eterno, del empíreo celeste!
Espada Gloriosa: combate todo espíritu ruin en nuestras familias, en nuestra mente y en nuestro corazón.Gloriosa Espada de San Miguel Arcángel, coloca este signo victorioso sobre mi mano derecha para dar la victoria final y poder vencer todo espíritu destructor que quiera alejarme de la Gracia Santificante.
Ven Gloriosa Espada de San Miguel, relampaguea con un rayo del Santo Espíritu, para poder ver el rostro de nuestro Padre Amado Celestial y ser digno de las promesas de mi Señor Jesucristo. Amén
Que la Paz del Altísimo, permanezca en vosotros, Amado Pueblo de Dios.
Vuestro Hermano y Servidor, Miguel Arcángel.
Dad a conocer mis mensajes a toda la humanidad, Simiente de mi Padre.”
Fuente: mensajesdelbuenpastor








“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."