¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
MENSAJE DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
A SU AMADA HIJA LUZ DE MARÍA
3 DE FEBRERO DEL 2018
El mal se hace presente en Inglaterra. Uruguay se estremece
“Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado:
DESDE LO ÍNTIMO DE MI CORAZÓN LES BENDIGO. SON EL PUEBLO DE MI HIJO Y NO SERÁN ABANDONADOS.
En estos instantes en que el mal se ha propagado por la Tierra y ha acaparado a gran parte de Mis hijos y al vivir la Humanidad ensimismada en el error, se ha hecho cada vez más dura de corazón actuando en retroceso espiritual.
No son llamados a servir a dos señores… No les He llamado a servir al mundo antes que a Mi Hijo…
Mis Llamados han sido constantes para que posean el conocimiento con respecto a lo que sucede cuando se alejan de la Voluntad Divina. La claridad de Mis Palabras a través de Mis Apariciones y Revelaciones ha sido para que ustedes se mantengan alerta y no sean presa del mal, pero han desobedecido.
Pueblo de Mi Hijo, velen por la Verdad y continúen unidos a Nuestros Sagrados Corazones, sean verdaderos hermanos, sin contiendas ni falsedades.
EL QUE CREE SER EL MÁS GRANDE E IMPORTANTE ENTRE USTEDES, ES EL MÁS PEQUEÑO Y ESE NO LOGRARÁ MIRAR MÁS ALLÁ DE SU NECEDAD HASTA QUE SEA HUMILDE.
Yo miro a cantidad de hijos Míos rezar el Santo Rosario, les miro acudir a la Santa Misa y recibir a Mi Hijo, les miro ayudar en los templos y a la vez, miro a esas creaturas posesionarse de lo que no les pertenece: la Verdad y el juicio, tomando un podio en el templo para que los hermanos les admiren.
¡Cuánto celo existe en corazones opulentos que creen poseer la Verdad y los privilegios en la Casa de Mi Hijo! ¡Ay de esas criaturas!, piedras de tropiezo que son armas del mal para entorpecer la Voluntad de Mi Hijo, ¡pobres criaturas!
YO LES HE LLAMADO A SER AMOR COMO MI HIJO LO ES CON USTEDES, PERO CON TRISTEZA MIRO UNA REACCIÓN CONTRARIA.
¿Qué sucede con Mis hijos cuando olvidan el Don de la Palabra? Dicen que no han dado muerte a ningún hermano y Yo les llamo a revisarse interiormente.
¿Saben, hijos, que la lengua es espada de doble filo y cada uno la utiliza para alabar, bendecir o para maldecir? Solo que han olvidado que el que maldice se expone a que esa maldición regrese a él, como el que bendice sabe que la bendición regresa a él.
El mal que desean para el hermano es el mal que preparan para ustedes mismos sin ni siquiera pensarlo.
Como Humanidad penden de un hilo fino. Grandes naciones, que bien conocen, poseen avances tecnológicos en el campo armamentista, se han dedicado a prepararse para defenderse de posibles ataques de otros países. Ante tanto avance, las anteriores guerras que ha sufrido la Humanidad parecen un juego con respecto al armamento de guerra que poseen en este instante una gran mayoría de países, aunque en menor cantidad que las grandes potencias.
EL HOMBRE HA LOGRADO QUE LA TIERRA SEA COMO UN CAMPO MINADO, INSEGURO PARA TODA LA HUMANIDAD, DEBIDO A QUE EN INSTANTES LA SOBERBIA DE ALGÚN MANDATARIO SE VERÁ APLASTADA Y ESO BASTARÁ PARA QUE INICIE LO QUE PARA LA HUMANIDAD SERÁ LA HECATOMBE.
No es necesario que los hombres se trasladen de un país a otro, solo una orden y la tierra arderá. Por ello les He llamado con insistencia a revisarse interiormente, a ser Amor cada uno, a ser Caridad, a no perder la Fe y mantener la llama de la Esperanza en que EL PUEBLO DE MI HIJO NO SERÁ ANIQUILADO.
CONVOCO AL PUEBLO DE MI HIJO PARA QUE MANTENGA LA FE Y SEA UN PUEBLO DONDE BRILLE LA VERDAD Y EL AMOR A LA SAGRADA PALABRA, EL RESPETO Y AMOR A MI HIJO EN LA SAGRADA EUCARISTÍA, ASÍ COMO EL CUMPLIMIENTO DE LA LEY DIVINA Y LOS SACRAMENTOS PARA QUE SEAN CREATURAS DE DIOS… PERO ESTE PUEBLO NO DEBE DESTRUISE A SÍ MISMO.
El Pueblo de Mi Hijo olvida que todo su obrar y actuar es mirado por la Trinidad Sacrosanta y por ello, no deben actuar a escondidas en contra del hermano, como lo hacen los ladrones aprovechando la oscuridad. Los tibios son fácilmente reconocidos por el mal y son fácilmente tomados para servir al mal.
Mi Corazón se duele profundamente al mirar a algunos de los Míos recibir a Mi Hijo, orarme y luego hacer el mal a los hermanos. Mi Corazón se duele por la criatura a la que perjudican y le dan muerte con la lengua y por la criatura que realiza la acción porque esa acción luego regresa al que la realizó.
Cuando les hablen de un futuro prometedor para la Humanidad, miren a su alrededor y miren que no es cierto, mientras la Humanidad en conjunto no se decida a un cambio radical y esto hijos…
Los países son azotados por lo inesperado, la Naturaleza alterada por el hombre, se desborda con fuerza descomunal.
Oren hijos, Guatemala es traspasada por el dolor, Uruguay se estremece y Mis hijos padecen.
Oren hijos, Colombia aprende con la dureza de su caminar.
Oren hijos, el rostro del mal se hace presente en Inglaterra y conmueve a Mis hijos de esa nación.
Oren hijos, México padece nuevamente y España suplica al Cielo ante un evento inesperado.
Les llamo a orar por Costa Rica.
La iniquidad no espera, hijos Míos, aléjense de lo que les separa de Mi Hijo, de lo que les separa del buen camino, de la Salvación.
Acudan ante esta Madre que intercede por cada uno de ustedes. Deseo para Mis hijos el camino del bien y a este se llega conociendo a profundidad a Mi Hijo.
VENGAN HIJITOS, VENGAN Y DE MI MANO CAMINEMOS HACIA MI HIJO, SIENDO USTEDES CUMPLIDORES DE LA VOLUNTAD DIVINA EN PAZ Y SIRVIENDO AL HERMANO.
NO TEMAN HIJOS, YO SOY MADRE DE TODOS Y POR TODOS SUPLICO ANTE LA TRINIDAD SACROSANTA.
Les bendigo, les amo.
Mamá María
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
Fuente: Revelaciones Marianas








“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."