¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
Mensajes de la Reina del Rosario a Gisella
§1: Rezad por Mis Intenciones
§2: Rezad mucho y haced círculos de oración
§3: Ahora vendrán acontecimientos no agradables…

§2
28 de septiembre de 2024
«Queridos hijos Míos, gracias por responder a Mi llamada en vuestros corazones y por estar aquí en oración, doblando vuestras rodillas.
Hijos Míos, ¡os pido que recéis por la Paz del mundo!
Orad mucho, hijos Míos, luchad con las armas de la oración. No os dejéis debilitar por el maligno, que se está aprovechando de las almas.

Hijos Míos, habéis cambiado el bien por el mal y el mal por el bien, esta es la confusión de vuestros corazones.
Pero vosotros escuchad Mis palabras, escuchad la voz del Espíritu que vibra en vuestros corazones y leed la Palabra de Dios. Sólo así comprenderéis cuál es el camino correcto a seguir, para que Mi Jesús ponga orden en este mundo desordenado.
Rezad por Mis Intenciones.»
§2
9 de octubre de 202
«Estoy aquí como Madre, os pido que os acerquéis a Dios con amor y por amor.
Rezad mucho y haced cenáculos de oración.
Rezad el Santo Rosario para que el mal no prevalezca.
Rezad, especialmente por la Iglesia, por los sacerdotes, por los cismáticos y herejes, para que vuelvan al camino que lleva al cielo.

Rezad por los sacerdotes, amados hijos, para que sean sal de la tierra como los primeros sacerdotes y luz para iluminar a la humanidad.
Sean fieles al Evangelio y a la verdadera Doctrina de la Iglesia y sean valientes y fervorosos como los primeros Apóstoles.»
§3
3 de octubre de 2024
«Amados hijos… hijos Míos, os pido en un momento tan delicado: reuníos a menudo en el rezo del Santo Rosario, arma poderosa para destruir el Mal, que es fuerte y que quiere destruir vuestras vidas, vuestra fe y vuestras familias.

Hijos Míos, ¡preparaos!
Todo lo que ha sido predicho en las apariciones en el mundo, ahora vendrán acontecimientos no agradables…
El miedo y la angustia estarán en los corazones de gran parte de la humanidad, pero sólo aquellos que tienen verdadera Fe, aquellos que conocen a Mi Hijo, tendrán paz y serenidad en sus corazones.
Esto es lo que os digo: ¡refugiaos en Mi Corazón Inmaculado y en el de Jesús!
- Él, que os regará, incluso cuando el agua ya no sea buena.
- Él, que os saciará, cuando el alimento ya no se encuentre.
- Él, que cuando las tinieblas desciendan sobre el mundo y no haya más luz, será vuestra Luz perfecta.
Hijos Míos, ¿qué buscáis en el mundo?
A estas alturas, ¡no habrá más que sufrimiento!
¡Sed verdaderos discípulos!
Difundid la Palabra y predicad el Evangelio, pues sólo Jesús es el Camino, la Verdad y la Vida.
¡Estad siempre vigilantes!
Las inundaciones, los terremotos y las guerras continuarán con fuerza. Pero vosotros, hijos Míos, ¡estad en Paz!

Dad esperanza a vuestros hermanos, porque todo el que crea en Él se salvará y tendrá vida eterna.
Convertíos, hijos Míos, Yo estoy aquí, porque os amo y os guardo en Mi Corazón, que la Paz sea con vosotros.
Ahora os dejo con Mi Bendición Maternal:
En el Nombre (+) del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén».
Leer mas profecías…
Fuente: La Regina del Rosario








“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."