¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
(M1922) Haces la señal de la cruz ante y lees todo sin prisa…
§1: Yo soy el Amo del mundo…
§2: Yo haré sonar el final de la dominación luciferina…
§3: Habéis entrado en el ciclo de preparación para la renovación…
§4: Practiquen ahora a ser autosuficientes…

§1
“Yo soy el Amo del mundo y parece que poca gente lo cree.
Los dirigentes se comportan como amos, dirigen, componen o por el contrario no componen. El presidente [corriente del país con la Torre Eiffel]. no tiene ninguna intención de componer porque se siente el líder de [la unión de los países del Viejo Continente]. y su objetivo es personal, tiene la mentalidad de “quien me quiere me sigue, …y si no lo quieres, peor para ti”.

Esta mentalidad prevalece en lo que la jauría llama democracia, que no es tal. Esta democracia ha colocado tantos módulos que permiten a quienes los mueven, como en una partida de ajedrez, mantener siempre la sartén por el mango y, si caen los que parecen mandar, sacar otro peón.
§2
El mundo está gobernado por el Enemigo, esto, hijos Míos, debéis saberlo, y mientras Yo, el verdadero Amo del mundo, le deje actuar, parecerá desbaratar todos los obstáculos.
¿Por qué dejarle hacer esto?
Porque los hombres son libres de hacer el bien o el mal y mientras no quieran volverse hacia Mí, para pedirme perdón por sus malas leyes, por el asesinato de sus hijos abortados o de todos los inocentes, por su inmoralidad, por su egoísmo y su orgullo, Yo los dejo a la consecuencia de sus actos y a su mala esclavitud.
Los dejo a sus malos impulsos y hasta que no doblen la rodilla ante el Nombre de Jesús, sufrirán todas las consecuencias de la guerra, la persecución y la privación de libertad.
Y finalmente, cuando Yo decida que ya es suficiente, como un árbitro termina un partido, Yo haré sonar el final de la dominación luciferina y renovaré la tierra y el mundo [1].

Ese día está muy cerca, hijos Míos, os lo he dicho muchas veces y ese momento ya ha comenzado.
§3
Habéis entrado en el ciclo de preparación para la renovación y Yo os pido, queridos Míos, que seáis fieles a Mí, que no Me hayáis abandonado, que recéis y hagáis penitencia, que practiquéis concienzudamente la ley divina y que Me pongáis a la cabeza de vuestras preocupaciones como dice el 1er Mandamiento divino:
“Un solo Dios adoraréis y amaréis perfectamente”.
Os pido que seáis feliz en vuestro corazón y en vuestra alma porque sabéis que Yo no estoy ausente, que velo por todo y por todos en particular, que acudo en vuestra ayuda cuando lo necesitáis, que os guío y no dejaré de guiaros durante vuestro viaje terrenal.
- Todo lo que os sucederá personal e individualmente es conocido por Me y nada Me deja indiferente.
- Sólo os pido que permanezcáis siempre fieles a Mí, y todo lo que os sucederá en la tierra será en Mi Amor.
Algunos pasarán providencialmente al mundo renovado, otros no, pero todos, absolutamente todos Mis fieles recibirán su recompensa, Mi Amor, Mi Bondad incomparable y la Felicidad Eterna.
§4
Quiero deciros que llegará un momento en que la comunicación virtual se interrumpirá, Internet se interrumpirá, la televisión también, toda comunicación será difícil y muchos de vosotros estaréis aislados.

Por lo tanto, practiquen ahora a ser autosuficientes, como lo fueron las personas de los siglos anteriores a ustedes.
Su riqueza era su horario diario y, para los que eran católicos, las pruebas se ofrecían a Dios para la remisión de sus pecados.

Dedicáis tiempo a Dios, reserváis vuestros pensamientos y acciones para Él, y volvéis a vivir pensando en Él en cada momento de vuestra vida cotidiana.
Así os prepararais para vivir los tiempos que se avecinan, que serán difíciles, pero que deben permanecer llenos de fe y de piedad.
Os estrecho a Mi Sagrado Corazón y os amo.”
Apocalipsis, capítulo 20 de Juan. El reino de los 1000 años. Secuencia de los acontecimientos: leer todo…
Fuente: srbeghe.blog





Dios Padre: «



“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”




"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."