El pecado sobreabunda. Esta generación vivirá lo que ninguna otra ha vivido

¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.

19 de julio del 2025 – mensaje de la Santísima Virgen María a Luz de María

“Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, reciban Mi Bendición Materna.

¡Bendigo a todos los hombres de buena voluntad! (Lc. 2,14).

(Lc. 2,14) “¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra, paz a los hombres de buena voluntad!”

¡Bendigo a los humildes de corazón (Mt. 11,29) porque en ellos encuentra regocijo el Espíritu Santo!

(Mt. 11,29) “Carguen sobre ustedes mi yugo y aprendan de mí, porque soy paciente y humilde de corazón, y así encontrarán alivio.”

El pecado sobreabunda y toma tantas formas que el agua continúa purificando con fuerza a la humanidad, el viento es purificador, los terremotos continúan en Asia, en en Asia, en [la tierra del Águila], en Centroamérica y en [el Viejo Continente].

La Iglesia de Mi Divino Hijo se divide (Jn. 17, 20–23).

(Jn. 17, 20–23) “No ruego solamente por ellos, sino también por los que, gracias a su palabra, creerán en mí. Que todos sean uno: como tú, Padre, estás en mí y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste. Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno, como nosotros somos uno –yo en ellos y tú en mí– para que sean perfectamente uno y el mundo conozca que tú me has enviado, y que yo los amé cómo tú me amaste.”

El hambre se generaliza y Mis hijos padecen aún más por ello.

Hijos de Mi Corazón Inmaculado:

Oren hijos, oren por Mis hijos Sacerdotes, padecen persecución.

Oren hijos, oren por toda criatura humana para que desde donde esté sea objeto de bendición para ustedes.

Oren hijos, oren, cantidad de Mis hijos han dejado de amar a Mi Divino Hijo, lo han abandonado por lo moderno que no es Voluntad Divina, se han unido a falsas ideologías que les llevan a caer en las garras del demonio, se han envenenado el corazón con envidia y resentimiento hasta llegar a vivir de odio con un corazón más duro que la piedra.

Desprecian tanto la vida, que practican [la terminación del embarazo] [1] sin el menor temor, acogen [quitar la vida a enfermos y ancianos indefensos] sin remordimiento.

Oren hijos, oren por ustedes y sus hermanos.

Oren hijos, oren por Argentina y Brasil, padecen por la oscuridad.

Esta generación vivirá lo que ninguna otra ha vivido…
A la vez será bendecida como ninguna otra generación ha sido bendecida…

Hijos, no teman, ¿acaso no estoy Yo aquí que soy Su Madre?

Mamá María».

Ave Maria Purissima,
concepita senza peccato
Ave Maria Purissima,
concepita senza peccato
Ave Maria Purissima,
concepita senza peccato

Comentario de Luz de Maria

“Hermanos: Nuestra Madre Santísima atenta a cuanto sucede a nosotros Sus hijos, nos previene de cuánto va a suceder para que salvemos el alma, no para que temamos, sino para que atendamos Sus Llamados y nos dispongamos al cambio.

Hemos sido alertados desde hace muchos años, tengamos presente lo que se nos ha dicho por amor:

16 de enero del 2019 – Nuestro Señor Jesucristo: «El campo magnético de la Tierra se ha adentrado en un proceso de alteración definitivo y por ende, el efecto protector sobre la Tierra se ha debilitado, exponiendo a la humanidad a una pérdida de los adelantos científicos y a un retroceso tecnológico sin precedentes».

30 de julio del 2009 – La Santísima Virgen María: «Hijitos, Yo permanezco ante cada uno de ustedes. No lo olviden, Soy Madre, cuando Mis hijos llaman, Mi Corazón no se resiste, en donde se reúnan a orar e invocar Mi Asistencia, ahí Yo Me hago presente, No Me resisto al ruego, al llamado, al amor de los Míos. ¡Les he hablado tanto sobre el poder y la importancia de la oración! Yo No Me resisto a la misma; así que no duden que donde Me invocan acudo presurosa».

Amén.”