La desolación que viene. La soga se apretará. Guardad Mis Leyes, vuestra esperanza, la fe

Pero ustedes, Mis fieles, no se dejen tentar (por satanás), no se dejen atrapar en sus redes, permanezcan cerca de Mí por la oración y por su conducta respetable, por su fidelidad a los Mandamientos de Dios y de la Santa Iglesia. Por esta fidelidad, Yo os guiaré en estos tiempos de incertidumbre y de excesos de todo tipo

27 March, 2024 at 11:11

(Haz la señal de la cruz ante de leer y lees todo sin prisa...) - 26 de marzo de 2024

(DeepL Translator) "Mis queridos Hijos, esta semana es santa, y ese es su nombre: Semana Santa. Consta de siete días, tres de los cuales son el punto culminante de Mi vida humana entre vosotros: Jueves, Viernes y Sábado Santos.

El Domingo de Resurrección es otro día inmenso, el del resplandor de Mi estado victorioso sobre la muerte, los infiernos y los demonios.

Han sido vencidos para siempre y Yo he alcanzado un éxito increíble en la tierra. San Miguel Arcángel había luchado contra Lucifer y había triunfado, pero Mi victoria es infinitamente mayor porque no sólo he luchado contra Lucifer y sus hordas, sino que también he aniquilado todas sus malas acciones desde Adán y Eva hasta el fin del mundo.

Aniquilé todos los pecados de los hombres, haciendo así ineficaz la acción de Lucifer. Esto lo volvió loco de ira, amargura y consternación.

Es verdad que él sigue siendo el dueño de todas las almas que ha atraído al infierno y por las cuales Yo no puedo hacer nada porque ellas no quieren y nunca lo querrán [la salvación], pero por Mi venida a la tierra y por Mi ofrenda sacrificial a Dios, Yo he borrado todos los pecados de los hombres; por su contrición y su propio deseo de fidelidad, Yo he barrido la obra corruptora y destructora de Mi eterno Enemigo.

Hijos Míos, uníos a Mí intensamente durante esta Semana Santa, porque Lucifer no os deja marchar.

Cuanto más Mi Redención os atrae hacia Mí, más os odia y busca dañaros.

Él es el instigador de todo sentimiento de odio, él es el promotor de todos los vicios y persecuciones; él odia a Mis discípulos con la misma intensidad que usó conmigo y no os hagáis ilusiones: él os está esperando en vuestras más mínimas debilidades y cuanto más ve que el mundo se hunde en sus redes, más lo encadena.

Hijos Míos, ha habido un gran atentado en un gran país vecino [1] y él (satanás) es el cerebro que está detrás. Él sabe cómo corromper, cómo tentar, cómo atraer a los hombres hacia sí, y los hombres indefensos, porque no son parte de Mi rebaño, se dejan corromper y atraer. No se detendrá ahí, tiene muchas cartas que jugar y su odio a la humanidad le hace actuar aquí y allá y lo más ampliamente posible.

Pero ustedes, Mis fieles, no se dejen tentar, no se dejen atrapar en sus redes, permanezcan cerca de Mí por la oración y por su conducta respetable, por su fidelidad a los Mandamientos de Dios y de la Santa Iglesia. Por esta fidelidad, Yo os guiaré en estos tiempos de incertidumbre y de excesos de todo tipo; guardad Mis leyes, guardad vuestra esperanza, guardad la fe.

'Cuando veáis la abominación desoladora, de la que habló el profeta Daniel, erigida en el lugar santo', dije a Mis hijos de Israel, 'entonces huyan los que estén en Judea, etc.' (Mt 24,15).

Pero a vosotros, hijos Míos, os hablaré de otra manera porque la desolación que viene se extenderá más allá de este lugar santo que era el templo de Jerusalén en el momento de su destrucción por los romanos en el año 70.

La desolación que viene, sí y viene, ha sido anunciada a menudo por Mis santos y Mis profetas. Será tanto material como espiritual.

Las iglesias quedarán desiertas de sus fieles porque la Verdad habrá sido desechada y sólo quedarán aquellos que hayan guardado el verdadero Bien: Yo, el Señor Jesucristo.

La soga se apretará sobre Mis amados porque ‘El siervo no es mayor que su Señor; Si me persiguieron a Mí, también los perseguirán a ustedes’ (Jn 15,18-21).

Que Mi Paz esté con vosotros y como Mis primeros fieles que desafiaron todos los abusos y persecuciones, seréis el nuevo maná de los nuevos tiempos y estaréis ‘ante el trono y ante el Cordero, vestidos de ropas blancas con palmas en las manos’ (Ap 7,9).

Mi Paz esté con vosotros y no temáis. La fuerza de Mi Espíritu Santo, la virtud ejemplar de Mis santos, os será dada en profusión y vuestro fervor cristiano no os abandonará.

Yo os bendigo, queridísimos hijos Míos, tened confianza, tened paz, que vuestra alma se refugie en Mi Alma y Mi Cruz no os sorprenderá, no, os atraerá y la querréis porque sois Míos.