¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
ABRIL 14 DE 2015
LLAMADO DE JESÚS DE LA MISERICORDIA A LA HUMANIDAD
Jesus: El universo está a punto de entrar en conmoción. El tiempo se acorte
“Hijos míos, paz a vosotros.
Se acercan los días de la gran tribulación, preparaos espiritual, sicológica y materialmente, para que podáis sobrellevar esos días de angustia.
No perdáis la cabeza, en todo momento orad y pedid la asistencia del cielo para que todo os sea más llevadero.
Os anuncio que los días van a acortarse más, no os asustéis, si no se acortasen los días no resistiríais la purificación.
Es bueno hijos míos que desde ya os vayáis acostumbrando a un nuevo régimen de vida; acostaos más temprano para que podáis descansar lo suficiente, porque las horas nocturnas van a ser muy cortas.
Un fenómeno cósmico que moverá el eje de la tierra está por llegar y va a hacer que su rotación se acelere más, lo cual hará que vuestro tiempo se acorte llegando los días al límite de duración de doce horas.
Este es el tiempo señalado por el cielo para dar comienzo a los días de la gran tribulación.
No entréis en pánico, acordaos que todo es divina voluntad; todo se desordenará en el universo para volver a acomodarse; solo así podrá resurgir una nueva creación.
El universo está a punto de entrar en conmoción, muchos fenómenos cósmicos vais a presenciar hijos míos.
Fenómenos nunca antes vistos por la humanidad; fuego del cielo caerá a la tierra como nunca antes se había visto y muchas naciones por su maldad y pecado van a desaparecer.
Todas las criaturas y la creación estarán en tribulación, por Divina Voluntad de mi Padre.
Todo tiene su tiempo bajo el sol y el tiempo de la gran tribulación ya está por llegar. De nuevo os digo, no temáis; si permanecéis en Mí, como el sarmiento a la vid, ninguno de vuestros cabellos se os perderá; más si os apartáis de Mí, os perderéis.
Yo soy la Vid de Vida Eterna, el Agua Viva, que os purificará para que podáis vivir eternamente.
Permaneced en Mí, y todo lo que está por venir pasará como un sueño para vosotros.
Acatad las instrucciones de mi Madre, acordaos que Ella, será el Sagrario donde permaneceré en aquellos días.
Buscad a mi Madre y me encontraréis y hallaréis paz y consuelo para esos días de angustia.
No soltéis su rosario, porque será la brújula que os llevará a las puertas de mi Nueva Creación.
Mi paz os dejo, mi paz os doy.
Arrepentíos y convertíos porque el Reino de Dios está cerca.
Vuestro Jesús de la Misericordia.
Dad a conocer mis mensajes a toda la humanidad.
Fuente: mensajesdelbuenpastorenoc.org





Dios Padre: «



“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”




"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."