¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
MENSAJE DE SAN MIGUEL ARCÁNGEL A LUZ DE MARÍA
19 DE AGOSTO DEL 2020
¿En qué momento del Apocalipsis se encuentran?
“Pueblo de Dios:
RECIBAN LA PAZ DIVINA NECESARIA EN CADA CRIATURA HUMANA.
En el momento en que en el mundo el furor de la humanidad se levante en la mayoría de los países y los hombres se abalancen contra sus hermanos y la paz sea anhelada y deseada porque la discordia se haya plantado en la Tierra, pregúntense:
¿EN QUÉ MOMENTO DEL APOCALIPSIS SE ENCUENTRAN?
- Cuando miren a los que acudían a la Misa diaria y recibían la Eucaristía…
- Cuando miren a los que rezaban en todo momento y lugar, a los que no dejaban lugar a dudas de su religiosidad…
- Cuando miren a los que vestían en forma exageradamente pudorosa ir a las madrigueras por temor a la persecución y nieguen a Nuestro Rey y Señor Jesucristo como “Su Señor y Su Dios” para salvar la vida…
TENGAN LA SEGURIDAD DE QUE LA PERSECUCIÓN NO DECLINARÁ, sino en su lugar se estará fortaleciendo contra el verdadero Pueblo de Nuestro Señor y Rey Jesucristo.
En los sitios alejados, en los sótanos de antiguos templos, en improvisados lugares, quizá en los menos pensados, acudirán para escuchar la Santa Misa y recibir a Cristo presente en la Sagrada Eucaristía, de manos de Sacerdotes fieles, adoradores de Cristo Eucaristía, amadores de Nuestra Reina y Madre de Cielos y Tierra, ante la clara y definitiva división de quienes se mantienen apegados al verdadero Magisterio de la Iglesia de Nuestro Señor y Rey Jesucristo y los que han vivido siendo fariseos dentro de la Iglesia, siendo desde ya, perseguidores del Pueblo fiel.
Pueblo de Dios:
NO ACTÚEN COMO LOS FARISEOS (Mt. 23), ACTÚEN COMO HIJOS FIELES A NUESTRO REY Y SEÑOR JESUCRISTO, CONVIRTIÉNDOSE ANTE LA INMINENTE PURIFICACIÓN QUE LLEGA DEL CIELO HACIA LA TIERRA Y LA INMINENTE SECUENCIA DE ACONTECIMIENTOS YA ANUNCIADOS ANTERIORMENTE A USTEDES, PARA QUE OREN, OFREZCAN AYUNOS, PRIVACIONES, AUXILIEN A LOS NECESITADOS, Y A LOS DESESPERADOS, LES OFREZCAN EL PAN DEL TESTIMONIO DEL VIVIR EN LA VOLUNTAD DIVINA.
El hombre posee libre albedrío, el que tiene que utilizar para adorar, para obrar y actuar, como verdadero hijo de Dios, para ser humilde y no soberbio y orgulloso. El altivo se llegará a estancar en el camino.
Oren a tiempo y destiempo, el gran estremecerse llega, el tiempo no es tiempo es el ¡ya! esperado y temido a la vez. Sin detenerse con los que desean perderles, ustedes continúen en el camino señalado, sin alejarse, sin olvidar que el demonio anda como león rugiente en busca de quienes devorar.
Sean cautos en el obrar y actuar, no se confundan con los confundidos, sean cautos, son el Pueblo de Dios y no hijos del mal. LA IGLESIA DE NUESTRO REY Y SEÑOR JESUCRISTO PADECE EN DEMASÍA, LOS ERRORES LLEVARÁN A LA PÉRDIDA DE LA FE, DE AHÍ QUE SEA TAN NECESARIA LA FE INAMOVIBLE, LA FE EN LA PRESENCIA DE NUESTRO REY Y SEÑOR JESUCRSTO EN CADA UNO DE SUS HIJOS.
Oren hijos de Dios, oren por la conversión de todos.
Oren hijos de Dios, oren para que continúen fieles.
Oren, oren por los países que padecen en el estremecerse esperado y no deseado.
Oren, oren por aquellos que dominados por la soberbia serán causantes del extravío de sus hermanos.
Oren, por los que padecen hambre, los atribulados, por la verdad en los gobernantes en la Tierra.
Amado Pueblo de Dios, el momento venidero es de engaño, no se extravíen, por ello es importantísima la oración con el corazón, el que se preparen para el GRAN AVISO (*) y se encuentren en paz.
Oren por Chile y por Colombia. Los proyectos del mal no se detienen.
Al final el Inmaculado Corazón de Nuestra Reina y Madre de Cielos y Tierra triunfará y el mal no tocará al hombre.
Pueblo de Dios:
¡NO SE DETENGAN!
SON MOMENTOS PARA QUE SE MANTENGAN EN GUARDIA.
NO OLVIDEN QUE EL AVISO LLEGA, Y COMO RELÁMPAGO, TOCA AL HOMBRE
¿QUIÉN ES COMO DIOS?
¡NADIE COMO DIOS!
San Miguel Arcángel.”
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
AVE MARÍA PURÍSIMA, SIN PECADO CONCEBIDA
Fuente: Revelaciones Marianas








“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."