Mantienen la mirada sobre los Balcanes y manténgase en estado de Gracia. Les prevengo por amor a cada uno de ustedes

¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.

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14 de abril del 2025 – Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a Luz de María

§1: Vengan conmigo a despedirse de Mi amadísima Madre
§2: Así inicia Mi Padecer en manos de quienes no Me aman
§3: Les llamo a orar a tiempo y destiempo

§1

“Amados hijos Míos, reciban Mi Bendición:

Al iniciar el Triduo Pascual en un solo pueblo que Me ama, les invito a acompañarme paso a paso junto a Mí y vivan cuanto Yo entregué por amor a cada uno de ustedes, hijos Míos.
Vengan conmigo a despedirse de Mi amadísima Madre…

Hablándonos con la mirada nos dijimos cuánto nos amamos y cuánto voy a padecer y junto a Mi Madre, dispuestos a cumplir la Voluntad de Mi Padre (Lc. 22,42).

(Lc. 22,42) «Padre, si quieres, aleja de Mí este cáliz. Pero que no se haga Mi Voluntad, sino la Tuya».

Oren hijos Míos: oren por las ocasiones en que han incumplido con sus padres cuando no se despiden por la ira que les domina, por los momentos de desobediencia y las negaciones que han cometido contra sus padres, faltando así al Cuarto Mandamiento (Ex. 20,12).

(Ex. 20,12) «Honra a tu padre y a tu madre, para que tengas una larga vida en la tierra que el Señor, tu Dios, te da».

Oren hijos Míos: oren por los padres de familia que confunden el amor con el libertinaje y no corrigen a sus hijos.
Caminen junto a Mí a participar de la Última Cena…

Y siendo espectadores miren cómo instituyo el Orden Sacerdotal y Me consagro a Mí mismo para quedarme con ustedes en Mi Carne y Mi Sangre y logren alimentarse de Mi Sangre y Mi Cuerpo presentes en la Consagración (I Cor. 11, 23-34; Mt. 26, 26-29; Mc.14, 22-25; Lc. 22, 14-20).

(I Cor. 11, 23-34) “Lo que yo recibí del Señor, y a mi vez les he transmitido, es lo siguiente: El Señor Jesús, la noche en que fue entregado, tomó el pan, dio gracias, lo partió y dijo: «Esto es mi Cuerpo, que se entrega por ustedes. Hagan esto en memoria mía». De la misma manera, después de cenar, tomó la copa, diciendo: «Esta copa es la Nueva Alianza que se sella con mi Sangre. Siempre que la beban, háganlo en memora mía». Y así, siempre que coman este pan y beban esta copa, proclamarán la muerte del Señor hasta que él vuelva. Por eso, el que coma el pan o beba la copa del Señor indignamente tendrá que dar cuenta del Cuerpo y de la Sangre del Señor. Que cada uno se examine a sí mismo antes de comer este pan y beber esta copa; porque si come y bebe sin discernir el Cuerpo del Señor, come y bebe su propia condenación. Por eso, entre ustedes hay muchos enfermos y débiles, y son muchos los que han muerto. Si nos examináramos a nosotros mismos, no seríamos condenados. Pero el Señor nos juzga y nos corrige para que no seamos condenados con el mundo. Así, hermanos, cuando se reúnan para participar de la Cena, espérense unos a otros.”

(Mt. 26, 26-29) “Mientras comían, Jesús tomó el pan, pronunció la bendición, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: «Tomen y coman, esto es Mi Cuerpo». Después tomó una copa, dio gracias y se la entregó, diciendo: «Beban todos de ella, porque esta es Mi Sangre, la Sangre de la Alianza, que se derrama por muchos para la remisión de los pecados. Les aseguro que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta el día en que beba con ustedes el vino nuevo en el Reino de Mi Padre”.

(Mc.14, 22-25) Mientras comían, Jesús tomo el pan, pronunció la bendición, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: «Tomen, esto es mi Cuerpo». Después tomó una copa, dio gracias y se la entregó, y todos bebieron de ella. Y les dijo: «Esta es mi Sangre, la Sangre de la Alianza, que se derrama por muchos. Les aseguro que no beberá más del fruto de la vid hasta el día en que beba el vino nuevo en el Reino de Dios.”

(Lc. 22, 14-20) Llegada la hora, Jesús se sentó a la mesa con los Apóstoles y les dijo: «He deseado ardientemente comer esta Pascua con ustedes antes de mi Pasión, porque les aseguro que ya no la comeré más hasta que llegue a su pleno cumplimiento en el Reino de Dios». Y tomando una copa, dio gracias y dijo: «Tomen y compártanla entre ustedes. Porque les aseguro que desde ahora no beberé más del fruto de la vid hasta que llegue el Reino de Dios». Luego tomó el pan, dio gracias, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: «Esto es mi Cuerpo, que se entrega por ustedes. Hagan esto en memoria mía». Después de la cena hizo lo mismo con la copa, diciendo: «Esta copa es la Nueva Alianza sellada con mi Sangre, que se derrama por ustedes”.

Oren hijos Míos: oren por quienes no creen en Mi Presencia Real en la Eucaristía, oren por quienes Me profanan y Me llevan a padecer.
Oren hijos Míos: oren por sus hermanos que no Me pueden recibir en la Sagrada Eucaristía.
Oren hijos Míos: oren por las manos que Me Consagran para que siempre se encuentren en estado de Gracia.
SíganMe hijitos: que es el momento de la entrega, uno de los Míos Me entrega por unas monedas…

§2

Así inicia Mi Padecer en manos de quienes no Me aman, Me niegan y Me llevan a la muerte de Cruz, para que Yo resucite a la Gloria y la Voluntad de Mi Padre se cumpla.

Oren hijos Míos: oren por los que se traicionan cada momento, cegados por la envidia; oren por quiénes, nublados por el egoísmo, venden al prójimo y Me venden a Mí.
Oren hijos Míos: oren por los gobernantes de las naciones que se van a traicionar entre ellos.
Oren hijos Míos: oren por Mi Cuerpo Místico que padece la persecución de quienes con manos ensangrentadas desean llevarles a vivir en el dolor.
Oren hijos Míos: oren por Nigeria y los Balcanes [1], oren por Centroamérica.
Oren hijos Míos: la tensión de este momento lleva a que un líder mundial sea asesinado y la energía nuclear sea utilizada causando estragos en el planeta.

§3

Les llamo a orar a tiempo y destiempo, es necesario para la protección de toda la humanidad y para que se preparen ante la oscuridad que se asoma.

Los conflictos en la Tierra continúan y la naturaleza golpea a Mis hijos, manténgase en estado de Gracia.

Les prevengo por amor a cada uno de ustedes, Mis hijos, es necesario que cambien.

Reciban Mi Amor, prepárense para el momento en que vivirán en Mi Libertad, sin temores, siendo libres, pero libres de verdad.

Su Jesús.”

Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida

Comentario de Luz de María

“Hermanos: Nuestro Señor Jesucristo nos invita a vivir junto a Él los momentos del Misterio Pascual: la institución de la Sagrada Eucaristía, el Orden Sacerdotal, el Sacramento de la Reconciliación y de Su Pasión y a la vez nos interpela sobre el obrar y actuar nuestro, invitándonos a sentir con el corazón esas horas amargas que como Hombre Dios vivió en honor a la Voluntad del Padre.

En este Mensaje Nuestro Señor nos deja ver claramente la urgencia de la conversión debido a lo acelerado del momento y a tomar conciencia como humanidad de lo que puede llegar a hacer una criatura humana en un momento en que se deja llevar por la mayoría o por sus bajos instintos. Interioricemos nuestros actos para que así corrijamos lo que debemos corregir y no seamos nuestros propios verdugos.

Hermanos, ponemos en sus manos el segundo libro de la Colección: “¡Ya todo está dicho por Mi Casa! – libro II” para que aprovechando estos días santísimos meditemos en lo que el Cielo nos ha alertado sobre la preparación espiritual.

[1] Recordemos el Mensaje de San Miguel Arcángel del 3 de noviembre del 2022:

“Mantienen la mirada sobre los dos países en guerra, siendo este el medio por el cual les distraen restando importancia a otros países en conflicto. Tengan presente que en los Balcanes se dará la muerte de un líder, lo que moverá de inmediato a la guerra entre las naciones.”

Fuente: Revelaciones Marianas