¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
25 de noviembre del 2024 – Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a Luz de María
§1: Les llamo a dejar todo lo que les distrae y aleja de Mí…
§2: El Anticristo no se encuentra lejos de ustedes
§3: Yo les envío a Mi Ángel de Paz
§4: Llega el período de temor…

“Amados hijos Míos, reciban Mi Amor, Mi Bendición, Mi Misericordia. ¡Recíbanme (en la Eucaristía)!
§1
Amadísimos hijos:
- Les llamo a dejar lo mundano, todo lo que les distrae y aleja de Mí…
- Les llamo a dejar la soberbia y la desobediencia hacia Mis Llamados…
¡Hijos Míos, deben convertirse!
Busquen la conversión interior, dejen ya todo lo que les detiene en el caminar espiritual; esos detentes que arrastran como cadenas aferrándose sin meditar en que la verdadera vida la vivirán junto a Mí en Mi Casa y deben salvar el alma.
Hijos Míos, son cada día más inconscientes, más aferrados a lo del mundo buscando una verdad que no encontrarán en la Tierra, sino la encontrarán al unirse cada momento a Mí, ser más y más a Mi Semejanza en el obrar y actuar cotidianos.
§2
Hijos Míos, el Anticristo no se encuentra lejos de ustedes, sino tan cerca de implementar su yugo opresor para toda la humanidad y lo saben y no atienden; se niegan a cambiar por no ser humildes, sino soberbios.
¿Y a dónde llevó la soberbia a Luz Bel? (Luzbel: Su nombre significa “Portador de la luz”) (Apoc. 12, 7-9).
Conviértanse en criaturas de bien, en criaturas que por su testimonio puedan auxiliar a sus hermanos cuando estos se encuentran vacíos espiritualmente.
Conviértanse, alejen el rencor y la envidia, de lo contrario no lograrán crecer espiritualmente. Denme sus problemas (Mt 11, 28-30) y Yo les entrego mi protección, déjenlos a Mi cargo con fe.
§3
Amados hijos: Yo les envío a Mi Ángel de Paz [1], aquel que con Amor Superior llegará a levantar al caído, a proveer al hambriento espiritual y material y llegará a sanar corazones de piedra, si desean ser sanos.

Mi amadísimo Ángel de Paz tiene nombre, no es Elías ni Enoc. Deben esperar para que lo reconozcan, deben esperar hasta que lo entregue en manos seguras para que se mantenga entre ustedes.
Amadísimos hijos, comprendan, “el que tenga oídos que oiga” (Mt. 13,9-16).
Este momento en que viven es único para esta generación, deben orar y además de orar y convertirse para que salven el alma (Mt. 10,28), deben ser criaturas que se mantengan preparadas espiritualmente, ser firmes en la fe.
La humanidad va a pasar por el crisol, continuarán los elementos siendo flagelo para Mis hijos.
- Llegó el momento que algunos deseaban que llegara y luego se lamentarán…
- Llegó el momento en que esta generación sabrá hasta dónde llega su fe….
¡Tantos de Mis hijos que se preparan con velas benditas y no se preguntan: ¿cómo está su alma? Continuando con la arrogancia que les caracteriza, ¿cómo pueden recibir el auxilio de Mi Casa si no lo desean?
§4
Hijos: llega el período de temor para Mis hijos, para los que creen y para los que no creen…

Llega la incertidumbre, la carestía, la oscuridad, la guerra que está dando muerte a inocentes, debido a la necedad de los gobernantes. Sólo un mal paso dado por alguno y la respuesta será fatal para la humanidad…
El hombre se ha olvidado de Mí, actúa por sus intereses sin mirar las consecuencias. La humanidad verá con sus propios ojos de lo que es capaz la criatura humana cuando son amenazados sus intereses y de lo que es capaz la ciencia mal empleada.
Oren a Mi Madre, oren el Santo Rosario por la paz en cada corazón de la humanidad.
Oren para que ustedes sean conversos, firmes y decididos.
Oren por los momentos que van a enfrentar y por aquellos que no los podrán resistir.
Oren por la oscuridad que Mis hijos mantienen en su corazón, en su mente turbada por la soberbia o la envidia.
Oren hijos Míos, por quienes les di una Misión y la han rechazado.
Amados hijos Míos, oren por las calamidades que enfrentan y enfrentarán.
Este momento no es para fiestas ni celebraciones, es para meditar y para tomar la decisión de dejar al “hombre viejo”, lleno de harapos, de su terquedad y convertirse en una criatura humana con vestiduras limpias con la firme decisión de salvar el alma.
Prepárense espiritualmente y debo decirles que es necesaria la preparación material con lo que cada uno pueda, lo demás déjenlo a Mi cargo.
Así como vivirán momentos muy difíciles, ¡verán milagros!
Jesús le respondió: “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre, sino por mí. Si ustedes me conocen, conocerán también a mi Padre. Ya desde ahora lo conocen y lo han visto” (Jn. 14, 6-7.
Les amo con Amor Eterno. Son Mis hijos y no les abandono jamás. Les amo. Su Jesús”.
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Comentario de Luz de María

“Hermanos: Recibiendo la bendición de Nuestro Señor, la agradecemos y nos disponemos a dar gracias por esta bendición. Hermanos, necesitamos ser conscientes de que lo que sucede en los países que se encuentran en guerra, no se quedará ahí, sino que involucrará al mundo. Cada paso hacia la guerra es un paso hacia cada país; de una u otra forma la humanidad entera padecerá porque Nuestro Señor Jesucristo no permitirá que el hombre destruya la Creación, obra de Dios. En reiteradas ocasiones se nos ha anunciado un cataclismo para la Tierra; se nos ha anunciado la guerra que irá impidiendo el abastecimiento de artículos de primera necesidad hasta que la hambruna será cruel.
Tengamos presente estos mensajes que nos dicen:
8 de febrero de 2019 – La Santísima Virgen María:
“Hijos, no piensan en una Tercera Guerra Mundial debido a que miran una aparente paz, pero la Tercera Guerra Mundial inició hace bastante tiempo atrás y esta avanza sigilosamente, de un lugar a otro enardeciendo a los hombres, levantando las llamas de la guerra”.
22 de octubre de 2014 – Nuestro Señor Jesucristo:
“La guerra llegará a la humanidad en un instante, sin que sea esperada, ya que se firman falsos tratados de paz y la humanidad piensa que no se desatará la guerra. ¡Cuán equivocados están, hijos Míos, cuán equivocados están!”.
Hermanos, tengamos presente que algunas guerras han sido detenidas por los pueblos que han orado e implorado para que sea detenida y en otros momentos la guerra se ha minimizado. Si hay un momento en el que nosotros como creyentes y como católicos debemos orar, es este. Sin olvidar que las enfermedades resurgen y ponen en vilo a la humanidad.
Dios es todo Omnipotente, Omnipresente, Todopoderoso y para Él nada es imposible, pero nosotros como sus hijos debemos pedir, reconocernos pecadores y pedir con fe el amparo de Nuestra Madre Santísima. Somos un pueblo que camina, un pueblo de vivos, no de muertos. Continuemos firmes en la fe, porque Dios no desampara a Su Pueblo. Amén.”
- Sobre el Ángel de la Paz: leer…
Fuente: Revelaciones Marianas








“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."