¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
21 de octubre del 2024 – Mensaje de San Miguel Arcángel a Luz de María
§1: No se extravíen
§2: Las familias están siendo atacadas por el demonio…
§3: El agua continúa avanzando…

“Hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo: Vengo en nombre de la Trinidad Sacrosanta a traerles la Palabra Divina.
§1
Como Jefe de los ejércitos celestiales nos encontramos luchando contra el maligno opresor de las almas.

Las criaturas humanas no se enteran de nuestra aguerrida lucha en contra del mal ni de nuestra protección constante hacia cada uno de ustedes.
Todos están siendo tentados seriamente por el demonio y sus legiones (II Pe. 2, 9) para que se aparten de la Trinidad Sacrosanta y de Nuestra Reina y Madre y de sus compromisos con la Casa Paterna; sin meditar que están cerca del momento del Aviso [1] y se examinarán a sí mismos, sometidos al dolor impensable por haber cometido actos contrarios a la Voluntad Divina, desobediencias y haber dado el primer lugar al ego. Se lamentarán de cuánto dieron preferencia al mundo y no a la Trinidad Sacrosanta.
Ustedes resisten la tentación (Sant. 1,12-17; I Cor. 10,13) con el Alimento Eucarístico, la oración y la humildad, pero otros de ustedes no resisten la tentación y caen cuando el Demonio les toca el punto más débil que toda criatura humana posee y caen, dando el triunfo al Demonio. Les convoco a unirse para que formen una muralla de protección y así el Demonio no les pueda llevar a quedar en tierra.
§2
Hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo: No entienden que se encuentran dentro del momento en que se desarrolla el cumplimiento de las revelaciones anunciadas. Algunas serán mitigadas por el ofrecimiento de ustedes, otras no son condicionadas a la respuesta del hombre, ya que el mismo hombre es el causante del dolor de la humanidad.
Las familias [2] están siendo atacadas por el demonio: la falta de fe es un detonante en las familias, así como la desobediencia y el ego del cual son presa; la misma vanidad se apodera de ustedes impidiéndoles pensar en este presente y el futuro llega como ladrón por la noche.
§3
Hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo: El agua continúa avanzando, siendo azote a donde llega, atrayendo el padecer fuertemente, con gran dolor. Los sismos anunciados llegan uno tras otro. Les llamo a no desesperar, se encuentran protegidos por Orden Divina.

Es necesario que se preparen para el momento del apagón [3], es urgente que lo hagan, como es debido, el sol amenaza a la tierra.

El flagelo de la guerra es inevitable; avanza ocultándose y silenciosamente saltará de un momento a otro como gigante sin que lo esperen, cruzando el océano causará gran dolor.
Hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, clamen a Nuestra Reina y Madre, se encuentra ante ustedes para que le den la mano.
Oren hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, oren la enfermedad llegó y avanza.
Oren hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, oren por toda la humanidad, lo necesita.
Oren hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, oren, adoren a Nuestro Rey y Señor Jesucristo, adórenle en espíritu y verdad, es el Rey de la Gloria, ante Él toda rodilla se dobla.
Oren hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, sean cada momento, más creyentes, más espirituales y menos de lo mundano.
Oren hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, oren, mantengan la fe, nuestra protección permanece con cada uno, mantengan el corazón limpio, sean criaturas de bien e intensifiquen la luz del Espíritu Divino en ustedes. Cuando no exista la luz creada por el hombre, ustedes podrán poseer la Luz Divina. Mantengan la paz.
Hijos de Nuestra Reina y Madre manténgase en oración, (Ef.6,17-18; I Tes. 5,16-18) reparación y unidad.
Hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, “adórenle en espíritu y verdad” [4].
Les bendigo. San Miguel Arcángel.”
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Comentario de Luz De María

“Hermanos: San Miguel Arcángel nos da otra gran lección, nos define el panorama de este momento en que vivimos. Nos recalca con maestría la necesidad que nosotros tenemos de mantenernos con el corazón limpio. Nos encontramos a unos cuantos pasos de la iluminación de la conciencia, sabemos cómo debemos obrar y actuar para que esta iluminación no sea causa en nosotros de vivir el dolor que no hemos vivido en ninguna ocasión.
Hermanos, debe existir en verdadero arrepentimiento de las obras y actos que hemos cometido en la vida y mantenernos en pie de batalla para convertirnos. No es que, habiéndonos confesado, el Aviso no lo vamos a vivir, eso no es así, pero sí debemos confesarnos y mantenernos en la disposición de vivir haciendo el esfuerzo para no quedarnos por tierra, sino reconocer las faltas y de nuevo retomar el camino de la conversión. Que el Aviso nos encuentre luchando, no de brazos cruzados.
Además, San Miguel Arcángel nos explica la lucha del Demonio contra nosotros y contra la familia, a la cual desea derrumbar con todas sus artimañas. Pero a la vez San Miguel Arcángel nos da las indicaciones para que la familia logre mantenerse en pie, manteniendo la fe, el amor, la oración del Santo Rosario y alimentándose de la Sagrada Eucaristía.
San Miguel Arcángel nos llama a prepararnos como lo he subrayado anteriormente en el espíritu, pero también con lo que cada uno pueda, guardando alimentos, medicamentos y lo que para cada familia o hermano sea indispensable; sin olvidar que quien no pueda prepararse con alimentos y demás, posee la Palabra Divina de que va a ser asistido por los Ángeles del Cielo.
Somos Pueblo de Dios que vamos luchando contra el propio ego cuando este crece tanto, que quiere opacar la Voluntad Divina.
Ante una llamarada solar vamos a entrar en el período del apagón, de la oscuridad, pero Nuestro Señor Jesucristo es infinitamente Misericordioso y nos dice por medio de San Miguel, que si estamos unidos al Espíritu Santo, la oscuridad no nos causará temor ni desesperación, porque la luz del Espíritu Santo siempre nos va a permitir sentir la luz interior; no como en los Tres Días de Oscuridad, pero sí esa luz que traspasa toda oscuridad, esa Luz Divina.
Hermanos, la Casa Paterna siempre nos da una seguridad en toda situación que viene para toda la humanidad. Es ese el Amor Divino que las criaturas humanas no comprendemos porque proviene del verdadero Amor, del Amor Divino. Es esa Misericordia infinita que no se comprende porque la criatura humana no la posee, hasta que more en nosotros la plenitud del Espíritu Santo.
Es ese ardor, esa sed por las almas, la que nos permitirá, en medio de todo, sentir que no estamos solos, que Dios está con nosotros, Nuestra Madre Santísima está con nosotros y San Miguel Arcángel está con sus Legiones amparándonos.
Mantengamos la fe hermanos, que Dios solo hay uno y es omnipotente, omnisciente y omnipresente y no hay Dios más grande. Oremos hermanos y adoremos a Nuestro Dios y Señor con la firme convicción de que, si estamos con Él cumpliéndole, nos da lo que nos promete.
Sé que la preocupación de todos es por quienes no desean creer en la Palabra de la Sagrada Escritura, pero hermanos, ante todo lo venidero para la humanidad en algún momento quienes no aman ni adoran a la Trinidad Sacrosanta se sentirán necesitados del Amor Divino y volverán al redil. Las oraciones nacidas del corazón siempre son escuchadas.
Hermanos les invito a orar:
Trinidad Sacrosanta te adoro, te glorifico
y por cuántas oraciones no te he adorado,
te adoro en este presente
y reparo ante Tu Santísima Majestad.
Trinidad Sacrosanta te suplico que
me auxilies y pueda mirarte en todo lo creado,
moras en mí y no te reconozco.
¡Cómo puedo ser tu criatura, sin conocerte!
Te necesito para saber amarme
y amar a mis semejantes correctamente,
necesito lograr amarte, ya que resides en mí.
Trinidad Sacrosanta,
tengo sed y hambre de Ti.
Pero, ¿cómo saciar
mi hambre si no te encuentro?
¿Cómo no tener sed,
si no logro beber del agua viva?
Trinidad Sacrosanta,
Tu auxilio es permanente hacia la humanidad,
caes como rocío sobre todos,
a todos Tu amas en igual medida,
pero no todos te correspondemos;
siendo Dios, tocas a mi puerta
una y otra vez y no te abro.
Trinidad Sacrosanta,
ha sido larga la espera,
pero ahora que estamos avanzando
hacia tantos cumplimientos,
debemos preguntarnos:
¿estamos preparados?
Trinidad Sacrosanta este pecador arrepentido
al que has dado tanto amor, hoy te pide perdón,
por mí y por la humanidad porque no obedecemos
y nos embarga la ira, olvidando Tu Infinita Misericordia.
Ven Trinidad Sacrosanta,
lléname de Ti, para que,
viviendo en Ti, te lleve por donde camine,
para que seas mis ojos, mis pies,
mi mismo corazón,
mis deseos y mi boca para adorarte como lo mereces.
Ven, sé mi luz, sé mi Sol,
sé mis pensamientos,
sé mi razón y mis sentimientos;
en una palabra, sé todo mi ser.
¡Ven Trinidad Sacrosanta a morar en mí!
Amén.”
- Sobre el Aviso: leer…
- Sobre la familia: leer…
- Sobre el gran apagón: leer…
- En espíritu y verdad: leer…
Fuente: Revelaciones Marianas








“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."