¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
10 de octubre del 2024 – Mensaje de San Miguel Arcángel a Luz de María
§1: Les llamo a la conversión, a la oración
§2: Se enfrentan al Aviso
§3: El agua y el viento no se detienen…
§4: Les invito a mantener la reserva de alimentos

“Amados hijos de la Trinidad Sacrosanta, Mi Protección se encuentra en cada uno de ustedes.
§1
Vengo en nombre de la Trinidad Sacrosanta para alertarles. Les llamo a la conversión, a la oración, a recibir a Nuestro Rey y Señor Jesucristo debidamente preparados.

Sean amor como la Trinidad Sacrosanta es Amor (I Jn. 4, 7-9).
Es deber de cada uno centrarse y ser consciente del obrar y actuar personal, ya que de ello dependerá el que resistan los engaños del Maligno que ataca a las criaturas humanas en el deseo, en la mente, en el pensamiento y en el corazón para llevarles a caer; de esa manera mantenerles en el lodo sin que logren retomar el vuelo.
§2
Hijos de la Trinidad Sacrosanta, se enfrentan al Aviso [1].

Mirarán una luz proveniente de lo alto y esta iluminará hasta la sombra. Luego, estremecidos por este gran suceso llega el silencio, no escucharán nada ni se moverá nada, todo estará en el Silencio de Dios en donde cada uno estará ante su propia conciencia y se examinará en su obrar y actuar, aunque no lo desee.
Este Acto de Misericordia Divina es para toda la humanidad, la oportunidad de la conversión. Antes de este exceso de Misericordia Divina, decídanse al cambio interior en ustedes; y aunque examinarán sus pecados, el bien que han dejado de hacer y el bien que se han negado a recibir, los mirarán y les dolerá.
El firme propósito de adelantar el cambio interior (I Jn. 1, 8-10) es un tesoro para quién así lo desee.
§3
Amados hijos de la Trinidad Sacrosanta, como humanidad continúan enfrentándose a los embates de la naturaleza.
Hijos de la Trinidad Sacrosanta, padecerán por las emanaciones del sol causando inesperadas tormentas eléctricas, climas diversos en América y en Europa. Varios países no tendrán luz eléctrica, el agua y el viento no se detienen, continúan siendo flagelos para la humanidad.

La criatura humana siente que ha superado la prueba y se ríe de los Anuncios de la Casa Paterna, pero al volver la mirada se mira ante lo anunciado. Continúan los huracanes, los fenómenos atmosféricos que les sorprenderán.
Oren hijos de la Trinidad Sacrosanta, oren por Estados Unidos y México, padecen por la naturaleza.
Oren hijos de la Trinidad Sacrosanta, oren por Centroamérica, en especial por Honduras y Guatemala.
Oren hijos de la Trinidad Sacrosanta, oren por América del Sur, la enfermedad llega.
Oren hijos de la Trinidad Sacrosanta, la guerra continúa recrudeciendo.
Hijos de la Trinidad Sacrosanta, son momentos difíciles para esta generación entregada a los placeres, al libertinaje y al pecado que le complace por desobedecer a la Trinidad Sacrosanta. Se satisfacen por ir en contra de lo que Dios Uno y Trino les solicita.
§4
Les invito a mantener la reserva de alimentos, pero sobre todo a mantenerse firmes en la fe y así logren encontrar el culmen de la vida en la misión que le ha sido encomendada a cada uno de ustedes.
Oren, oren a la Trinidad Sacrosanta y a Nuestra Reina y Madre, oren con el corazón para minimizar los embates que les llegan, si así es la Voluntad Divina.
Tengan presente que no todo lo que llega a la humanidad es permitido por la Trinidad Sacrosanta, sino en su mayoría es causado por la criatura humana.
Oren sin detenerse y reparen por quienes desprecian las Peticiones Divinas.
Cada uno de ustedes posee una misión personal:
- Algunos no lo saben y deben descubrirlo…
- Otros sí lo saben y la desprecian…
- Unos anhelan la Voluntad Divina y otros la rechazan…
En todo momento y lugar poseemos la Misión de defenderles del mal y así lo cumplimos.
Mantengan la seguridad de la Protección Divina, sean criaturas de bien.
Les bendigo. San Miguel Arcángel.”
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Comentario de Luz de María

“Hermanos: Nuestro amado San Miguel Arcángel nos alerta para que, sin caer en la exageración, reflexionemos en la vida interior. También nos llama a reflexionar en el comportamiento del aire, el agua, los terremotos que aumentan, así como en las enfermedades. San Miguel Arcángel nos alerta sobre la enfermedad que llega y que quizá ni se conozca.
Hermanos, pensemos en la misión personal; esta puede que sea orar y reparar por los que no lo hacen y esta es una gran misión. Puede ser que tu misión sea ser la de predicar y esta es otra gran misión o puede que sea ser testimonio del amor de Dios para nuestros hermanos y esta es una gran misión. Desde la última fila todos tenemos grandes misiones que cumplir. Pidamos a Nuestra Madre Santísima nos auxilie para continuar siendo cumplidores de la Voluntad Divina.
Hermanos, mantengámonos atentos a los elementos que flagelan a la criatura humana. Oremos para que San Miguel Arcángel y Sus Legiones Celestiales nos auxilien en cada momento. Amén.”
- Revelaciones sobre el AVISO: leer…
Fuente: Revelaciones Marianas








“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."