
San Pablo esplica el error de creer en la Reencarnación
Salva tu Alma28 NovemberNovember 28Blog, Doctrina y Verdad
Lo único que se reencarna es esta teoría vuestra que reaparece como la herrumbre, en periodos alternados de oscuridad espiritual, pues éste es el signo de...

El juicio de las almas… Los pecadores necesitan vuestras oraciones
Salva tu Alma27 NovemberNovember 27Blog, Soeur Beghe
Los hombres en peligro se olvidan demasiado a menudo de Mí, y los peligros son muchos. Son muchos a causa del pecado original, que permitió a la naturaleza...

Sabéis muy bien que estos son los últimos tiempos, así que tratad de vivirlos en gracia de Dios para merecer la vida eterna.... escuchad Mis últimas...

Quiero deciros esto: Rezad y no dejéis de rezar porque toda guerra es cruel, hiere, mata, empobrece, desestabiliza. Mi Providencia vela por vosotros y pase lo...

El mayor número de Mis hijos han seguido a la llamada Iglesia conciliar y, a pesar de su buena fe, van por caminos tortuosos. Ya no tienen la fe de sus...

Oración y preocupaciones: ¿Qué es la oración?
Salva tu Alma25 NovemberNovember 25Blog, Soeur Beghe
No recibís la ayuda que os doy porque no corresponde a lo que esperáis... Vosotros tenéis vuestra manera de hacer las cosas, y no os imagináis que otro las...

Es inminente, no esperen más. Prepárense espiritualmente, conviértanse
Salva tu Alma24 NovemberNovember 24Blog, Luz de Maria
Grandes y graves terremotos ya anunciados… La hambruna que llega a establecerse en la humanidad… Y las nuevas enfermedades que se encuentran en la Tierra y...

Es tiempo de persecuciones, pero de una de las más grandes persecuciones, porque los cristianos son torturados en masa y no individualmente. El lugar es la...

Jesús explica las consecuencias del suicidio
Salva tu Alma23 NovemberNovember 23Blog, Doctrina y Verdad
Le vida es don de Dios, y see le propia o le ajena, y sólo a Dios, que le he otorgado, le está reservado el poder de quitarla.

Este es el verdadero fruto del último Concilio, y todos vosotros, hijos Míos, veréis sus garras fatales cuando dejéis la tierra después de vuestra propia...

Los tiempos que se avecinan serán difíciles y tendremos que aprender a hacer sacrificios con dignidad, del mismo modo que un cristiano debe privarse sin...

[Valentina] di a mis hijos que recen y se arrepientan. Muchos acontecimientos ocurrirán en el mundo, y será muy difícil y duro pasar por ellos. Esta guerra...




“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."