
Oren sin detenerse ante la proximidad de la guerra
Salva tu Alma22 NovemberNovember 22Blog, Luz de Maria
¡Despierten, se encuentran ante la hecatombe y duermen en las telarañas del demonio! No sólo en las consecuencias de la guerra deben pensar, sino a la vez...

Pero hay otra cosa que quiero decirles: cuantas más catástrofes ocurren en el mundo, más hay purificación, y Mi Juicio ya está aquí, así como Mi Venida,...

Todos serán testigos de un cambio en sus vidas y hogares dondequiera que se rece el Santo Rosario de Mi Hijo

No puedo ir más lejos. Seguid rezando, poned vuestra confianza en Nuestra Señora de la Reparación: haced del Gran Mensaje de la Reparación una brújula...

Las Naciones pagarán justamente, cada una por separado, el precio de sus delitos, Dios no admitirá sobornos de ninguna clase ni se dejará conmover por los...

Oren por la paz del mundo. Sean solidarios, hijos Míos. Fortalezcan su fe, hagan el bien unos a otros, difundan la paz de palabra y de obra, la paz de Mi Hijo...

La espada de Mi Justicia caerá pronto sobre el mundo, enmudecerá el sacrilegio y el impuro no podrá ver Mi Rostro, el mundo recibirá la primera lección...

Qué locura ver la apostasía de las naciones, la blasfemia especialmente dirigida hacia las cosas santas, el rechazo de todo lo que merece respeto, la...

Para ustedes es importante el prepararse, no solo para que enfrenten cuanto van a vivir como parte de la humanidad, sino para que cada uno se prepare...

Una vez que la bestia y sus seguidores controlen vuestro dinero, controlarán todo, excepto una cosa: vuestra alma. Para los no creyentes y los que cantan las...

No importa quien sea elegido presidente, los disturbios civiles se desatarán en este país y en todo el mundo. Seremos destruidos desde dentro. Se acerca el...

Mi Palabra es verdadera. Es verdad en los Evangelios escritos por Mis cuatro Evangelistas, es verdad en el Apocalipsis, no tengáis miedo sino perseverad en la...




“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."