¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
4 de noviembre del 2025 – Mensaje de La Santísima Virgen María a Luz de María
§1: Vengo a pedirles la conversión
§2: Llegan los cambios ante ustedes
§3: Hijitos, no teman, manténganse firmes
§4: Comentario de Luz de Maria
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(Lectura: 3 min.)
§1
«Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado:
Les llevo en Mi Corazón Inmaculado, les bendigo, hijos, les bendigo.
- Vengo a pedirles la conversión… encuentro cantidad de Mis hijos sin convertirse y caminando cada vez más lejos de Mi Divino Hijo.
- Vengo por esos hijos con corazones de piedra en los que ni la razón penetra.
Encuentro hijos saturados de soberbia [1], sumergidos en un profundo y grave orgullo, hijos nadando en la autosuficiencia y con un deseo desmedido por sobresalir ante sus hermanos.
Es urgente hijos, que el rumbo de su caminar espiritual sea el de Mi Divino Hijo para que la fe les mantenga firmes ante los momentos a los que se deben enfrentar.
Se encuentran a un punto de la expansión de la guerra a nivel global.
Los elementos se volvieron en contra de Mis hijos actuando más y más fuerte, flagelándoles una y otra vez al ser tan desobedientes (Jn. 14, 23). Este actuar no se detendrá todavía, sino que continuará y toda la humanidad padecerá.
§2
Hijos de Mi Divino Hijo, como parte de esta generación viven este momento de cambios en todos los aspectos y la humanidad va a ser probada y a la vez confundida [2] para que pierda la fe.
Llegan los cambios ante ustedes, uno tras otro y con gran estruendo para confundirles con el fin de desviarles del camino recto; luego del estruendo y de las confusiones se encontrarán en el silencio absoluto quienes continúen obstinados en buscar a Dios en lo que no es de Dios.
- ¡Busquen la conversión!
- Es necesario que sean criaturas de bien, la oración es una aliada de todos Mis hijos en todo momento.
Continúen sin temores, sino al contrario, diciendo que Dios es Dios y ustedes Sus hijos (I Jn. 3,2; Sal. 100,3).
Necesitan declarar que son hijos de Mi Divino Hijo, constantemente ¡declárenlo!
Hijos, viven orando por sus familias y por el mundo entero para que en algún momento vuelvan al redil y recobren la fe, eso es lo que deben hacer: orar por los que no creen, no oran y no adoran. Ustedes siembren la semilla y permitan que Mi Divino Hijo y esta Madre rieguen la tierra y las semillas crezcan.
Amados hijos: Deben dejar de lado ese ego humano [3] al que ustedes le han dado permiso de obrar y actuar sin razonar. El ego humano no es la base de la búsqueda de la felicidad, nunca les llevará a descubrir la verdadera felicidad. No coloquen sus metas en el ego humano hasta que le domen y no atropelle a la razón puesta en Dios, Uno y Trino.
Amados hijos de Mi Divino Hijo: No sufran por Mí [4], Yo todo lo guardo en lo secreto de Mi Corazón (Lc. 2,19) y lo ofrezco por toda la humanidad.
§3
Oren hijitos, oren, la Tierra padece ante fuertes terremotos.
Oren hijitos, oren, Latinoamérica padece fuertes terremotos, las islas y algunas costas son azotadas por huracanes.
Oren hijitos, oren, la rebelión crece en varios países que antes parecían dormidos.
Oren hijitos, oren, Líbano sufre por la naturaleza y por un país hermano.
Oren hijitos, oren, Japón sufre por la naturaleza, Tailandia es presa de la naturaleza.
Oren hijitos, oren por ustedes mismos.
Oren hijitos, oren por Suramérica, llega la purificación de país en país.
Oren hijitos, oren, llega el Triunfo de Mi Corazón Inmaculado [5] en el que se encuentran todos Mis hijos.
Amados hijos, manténganse atentos, los sismos ocurren con frecuencia y fuerza.
¡No teman! ¿No estoy Yo aquí que soy Su Madre?
Vengan a Mí, les tomo de la mano y les conduzco hacia Mi Divino Hijo. Los Ángeles les mantienen protegidos, sean criaturas de amor.
Hijitos, no teman, manténganse firmes.
Amados hijos de Mi Divino Hijo: En estos tiempos de incomprensión, manténganse en la fe, no decaigan, busquen en todo momento a Mi Divino Hijo, “Rey de reyes y Señor de señores”, de quien es el Honor, el Poder y la Gloria por los siglos de los siglos, amén.
Les bendigo. Mamá María».
Ave Maria Purissima,
concepita senza peccato
Ave Maria Purissima,
concepita senza peccato
Ave Maria Purissima,
concepita senza peccato
§4
Comentario de Luz de Maria
«Hermanos, nos encontramos ante este Mensaje de Nuestra Madre Santísima, quien como Madre del Amor nos llama y nos detalla de cuanto carecemos para mantenernos en el camino de Su Divino Hijo.
Es imprescindible para nosotros conservar la fe en todo momento, ante todo lo que suceda porque hemos recibido de Nuestro Señor Jesucristo y de Nuestra Madre Santísima la seguridad de la protección en todo momento.
Nuestra Madre Santísima nos alerta ante los cambios que llegan en todo aspecto de la vida. Mantengámonos atentos para que no caigamos sin darnos cuenta en los cambios a los que se somete a esta generación.
Hermanos, el sol será causa de desolación en la Tierra.
Nuestra Madre nos llama a poner mucha atención a nuestro ego humano para que no nos lleve a lo mundano, sino que nosotros lo espiritualicemos. Recordemos este Mensaje de San Miguel Arcángel del 10 de noviembre del 2022:
“El ego humano no es para extirparlo, sino para transformarlo y fusionarlo al obrar y actuar de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, así todas las criaturas humanas vivirían con profundo amor y compartiendo la bendición de ser hijos de Dios.”
Unidos, continuemos orando y creciendo espiritualmente, así seremos mejores hijos de Dios y mejores seres humanos. Amén».
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- Sobre la soberbia: leer…
- Sobre la confusión: leer…
- Sobre el ego humano: leer…
- «No sufran por mí…» En el mensaje, la Santísima Virgen también puede referirse a la consternación y decepción del pueblo cristiano por la declaración del Vaticano del 4 de noviembre de 2025, en la que se afirma que María Santísima «no es Corredentora» (este título, que podría haber suscitado un nuevo fervor y entusiasmo entre los católicos y una nueva primavera de fe y de verdadero catolicismo, tal vez se haya considerado un obstáculo para el camino ecuménico, sinodal, panteísta y sincretista, emprendido por la Iglesia católica después del Vaticano II), en total oposición al papa Pío X, que llama explícitamente a María Santísima: «Corredentora del género humano».
- Sobre el Triunfo del Inmaculado Corazón de María: leer…
Fuente: Revelaciones Marianas
“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”
"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)" 
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)." 
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."