¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.

(GN1GN7-25) – Extractos de Mensajes del Cielo a Valentina, Australia

1. El demonio aparece en el celular
2. Solemnidad de la Ascensión de Nuestro Señor
3. Consolar a la Virgen y rezar por la gente en las zonas de guerra
4. Preparación para un tiempo especial que viene al Mundo
5. La Tierra después de la Transformación
6. La Pasión de la Tierra antes de la Transformación

§1

1. El demonio aparece en el celular

Valentina: “Hoy, durante la Santa Misa, una pareja se sentó en el banco delante de mí. El señor tenía un teléfono celular, que colocó boca arriba sobre el banco. Justo antes de la bendición final del padre Robert, el móvil empezó a funcionar de repente. Como yo seguía arrodillado, el teléfono estaba justo delante de mí, y en él empezaron a aparecer remolinos de colores. Al principio, pensé que podría ser nuestro Señor Jesús, pero luego los colores se transformaron en la imagen de una criatura horrible. Parecía un payaso con muchos cuernos y muchos colores.

Me asusté un poco y pensé: “¿Qué está pasando?”

De repente, el payaso empezó a hablar con una voz que sólo yo podía oír.

Demonio: «Ja, ja, ¿ves? ¡Yo también estoy presente en la Iglesia! No puedes librarte de mí».

Valentina: «¡Oh sí (dije), en el Nombre del Señor Jesús, lárgate! No tienes sitio en la Iglesia».

Demonio: «Ah, ah. ¡No! Sigo entrando en la Iglesia».

Eso representa que la gente tiene todo tipo de imágenes malignas en sus teléfonos y luego las traen a la Iglesia. Hice muchos Signos de la Cruz para librarme del demonio.”

§2

2. Solemnidad de la Ascensión de Nuestro Señor

Valentina: “Hoy, durante la Santa Misa, nuestro Señor Jesús apareció vestido con una túnica blanca y un manto rojo y estaba muy alegre. Le dije:

«Señor, hoy es un día muy especial, ¡Tu Ascensión a los Cielos!»

El Señor Jesús respondió:

«¿Y sabías que el Cielo no estaba abierto antes de que yo llegara? Yo abrí el Cielo. Pero hoy en el Cielo todos Me alaban y Me glorifican porque a través de Mí el Cielo se abrió.

Y sabes que el Cielo ya se regocija por Mi Venida. Mi Venida está cerca. Es mejor que lo creas. No está lejos.

Las semillas que planté en todo el mundo, que te mostré (lee el mensaje n. 5 del 24 de marzo de 2023, al final de la sección), ya están brotando, así que ¿no te dice eso algo? Mejor prepárate y dile a la gente que se convierta y cambie.

Habla claro y diles que los tiempos que se avecinan no serán fáciles para vosotros, para ninguno de vosotros.. La gente tiene que cambiar y arrepentirse y confiar en Mí, entonces será mucho más fácil para ellos. Más y más Gobiernos van a probaros y controlaros. Será muy difícil en la Tierra.

Hija Mía, ves como sufro, incluso hoy en este, Mi día especial, Estoy en el Cenáculo dándome en la Misa de Sacrificio en cada Iglesia, y es muy doloroso.

Visteis cómo sufro, pero después de Mi Venida a la Tierra, todo cambiará. No habrá más de eso porque todos comprenderán. Su prioridad será la vida espiritual, la oración, la Iglesia y la ayuda mutua. Será un paraíso tan maravilloso en la Tierra que nunca ha existido antes, nunca en la historia y nunca volverá a existir.

Nadie será más rico ni más pobre. Ahora, la gente en la Tierra sufre hambre, rechazo, pobreza, avaricia y todo tipo de cosas. La gente rica no comparte, pero después de Mi Segunda Venida, nadie será más rico o más pobre; cada uno será igual, y todos vivirán de la tierra, y no dirán esta es mi tierra; puedes elegir la tierra en la que quieres vivir. Todos se ayudarán mutuamente. Nadie pasará hambre. No habrá tecnología. La vida será muy sencilla. El aire será muy puro. Todo se renovará: una nueva primavera. Reinará la paz.

El Castigo vendrá a purificar el mundo; sólo así podré librarme del mal, pero al tercer día abriréis las ventanas y habrá aire fresco que podréis respirar sin toxinas ni contaminación. Habrá una nueva primavera, todo será nuevo: ya estarán creciendo flores y plantas diversas. La temperatura no será ni cálida ni fría.

Esta es una hermosa esperanza que trato de darte porque vas a pasar por mucho sufrimiento todavía, pero si confías en Mí, lo pasaremos juntos, y Yo te ayudaré».

Habrá mucha tentación y engaño en la tierra, pero nuestro Señor nos dará fuerza para pasar por lo que viene.”

§3

3. Consolar a la Virgen y rezar por la gente en las zonas de guerra

Valentina: “Hoy, durante las oraciones del Cenáculo, mientras rezábamos el Santo Rosario, se nos apareció la Virgen. Vi tres grandes lágrimas rodando por su mejilla derecha.

Nuestra Madre Santísima: «Mira el sufrimiento de Mis pobres hijos en la zona de guerra. Estoy tan triste que lloro como Su Madre, pero no es sólo porque tienen hambre de comida o porque los matan; lloro más porque mueren sin arrepentimiento y están perdidos. Dile a la gente que rece por estos pobres niños para que Mi Hijo Jesús tenga misericordia de todas estas almas».

La Virgen estaba tan apenada y lloraba mientras me daba este mensaje por ver tanta miseria en el mundo. Todos tienen derecho a la vida. Todos son Creación de Dios. Debemos consolar a la Santísima Madre rezando por todas estas personas.”

§4

4. Preparación para un tiempo especial que viene al Mundo

Valentina: “Esta mañana, cuando he rezado el Ángelus, ha venido la Santísima Virgen, Madre de Nuestro Señor Jesús. Ella dijo:

«La paz sea contigo, hija Mía Valentina. Vengo a darte una buena noticia. Mi Hijo Jesús te está preparando para un tiempo muy especial que está llegando al mundo. Queremos que seas valiente. Ahora, la gente no te cree, y no toman en serio lo que les dices, e ignoran los mensajes, pero muy pronto, las cosas van a cambiar.

Y siento mucho decirte que pronto, cuando las cosas cambien, todo el mundo tirará de ti en todas direcciones para que les ayudes».

§5

5. La Tierra después de la Transformación

Valentina: “Nuestro Señor vino de repente otra vez, acompañado de dos ángeles. Dijo:

«Ven conmigo porque quiero revelarte la Buena Nueva de Mi Regreso. […] Hoy experimentarás realmente cómo será la Tierra cuando se produzca toda esta transformación. (Sonriendo…) Nunca antes he mostrado o revelado esto a nadie, para experimentar lo que pondré en esta Nueva Era. Tú experimentarás lo que sucederá».

[…] A continuación me mostró un fino material de color azul celeste muy pálido con un delicado diseño que yacía sobre la exuberante hierba verde. La tela se extendía sobre una gran superficie, y Nuestro Señor me invitó a unirme a Él en medio de la tela. Nuestro Señor estaba prácticamente sentado sobre ella, y yo arrodillada a su lado. Los dos ángeles estaban de pie a un lado de la tela, observando. El material era plano y tenía una forma similar a la del mundo, y pude ver que algunos de los bordes reflejaban la forma y el contorno de algunos de los países del mundo. La tela representa la Tierra.

Jesús: «Ahora te lo mostraré. Vamos a entrar en la transformación».

Me acerqué más a Nuestro Señor y, ante mis propios ojos, fui testigo de la transformación que tendrá lugar en la Tierra. De repente, gracias de oro se derramaron desde el Cielo sobre nuestro Señor y sobre mí. Era impresionantemente hermoso. Éramos parte de esta transformación que estaba llegando al mundo. Él me estaba mostrando algunas semillas que sostenía en Su Mano. Eran de diferentes colores, algunas blancas, otras rojas como granos de pimienta. Entonces dijo:

«Estoy purificando la Tierra plantando estas semillas».

Nuestro Señor se dirigió al borde de la tela, y arrodillándose, levantando el material, colocó Sus hermosas semillas bajo los bordes del material. A continuación, doblaba cuidadosamente la tela por debajo, como un dobladillo sencillo, para que las semillas quedaran ocultas al mundo. Continuó haciendo esto, rodeando suavemente los bordes de la tela, poco a poco, colocando Sus hermosas semillas, siendo la bondad que descenderá sobre la tierra. Continuará haciendo esto hasta que se apodere del mundo. Por supuesto, con la ayuda de nuestras oraciones. El dijo:

«Estas son las semillas que estoy plantando para purificar la Tierra, que es tan tóxica y huele a pecados. Tan pecaminoso es el mundo ahora».

Mientras plantaba estas semillas, me las mostró y dijo:

«Son semillas buenas y puras, y puedes comerlas».

Cogió algunas y se las llevó a la boca. Pude ver que algunas de estas semillas ya habían brotado y estaban creciendo. Al mismo tiempo, nuestro Señor Jesús hizo que se produjera esta transformación.

Me quedé sin palabras; no puedo expresar lo hermosa que era una sensación de la que nunca quieres marcharte; toda la alegría y las gracias derramándose en la atmósfera que nos rodeaba, brotando de todas direcciones y descendiendo sobre la Tierra.

Estaba tan abrumada por lo que estaba experimentando, y vi a Nuestro Señor sonreír con inmensa alegría y deleite. Será una transformación completa del mundo; una Nueva Tierra.

Jesús: «Valentina, no sólo ocurrirá esto, sino que otra cosa hermosa que quiero decirte es que caminaré entre Mi pueblo y hablaré con ellos en la Tierra, en persona. Volveré a estar realmente presente en persona en la Tierra».

Luego me mostró grupos de personas de pie en una calle. Había hombres, mujeres y niños aquí y allá. Él caminaba de un grupo a otro, hablándoles, conversando con ellos. Y le llamaban de todas partes para que se uniera a ellos. Todos querían estar en Su presencia. Nuestro Señor quería hacer felices a todos. Era hermoso, y nuestro Señor estaba tan alegre.

Me mostró cómo la paz y el amor fluirán entre la humanidad. No habrá más odio. Será una vida sencilla. Todos se ayudarán y serán amables los unos con los otros.

Jesús: «Valentina, no tienes ni idea de cómo será. Será el Paraíso en la Tierra; no habrá más egoísmo ni codicia. Todo el mal será derrotado».

Nuestro Señor Jesús sonreía mientras me hablaba de la transformación de la Tierra.

Jesús: «Quiero que le digas a la gente que estoy cada vez más cerca de volver a la Tierra, y me estoy preparando para Mi Venida».

Nuestro Señor quiere que permanezcamos en Estado de Gracia y que le llamemos:

«Jesús ven, Jesús ven a Tu Reino».

Quiere que repitamos esto todos los días. Nuestro Señor está a cargo de la Tierra porque, después de todo, es toda Su Creación. Al final, cuando Nuestro Señor me mostró toda la transformación, el ángel trajo un gran recipiente cuadrado completamente blanco. Nuestro Señor colocó el recipiente en el centro de la tela, representando el centro de la Tierra. Bellamente colocadas en esta caja estaban las Hostias blancas, siendo la Sagrada Eucaristía.

Luego Nuestro Señor tomó un hermoso ramo de flores blancas que sostenía el Ángel. Con hojas verdes intercaladas y una cinta blanca atada alrededor de los tallos, eran flores celestiales que no se veían aquí en la Tierra. Nuestro Señor colocó las flores blancas en posición vertical en el centro de la caja de madera blanca. La gratitud de la gente será tan grande que se transformará en un ramo de flores celestiales. En la Nueva Era, la gente apreciará y reverenciará verdaderamente la Sagrada Eucaristía.

§6

6. La Pasión de la Tierra antes de la Transformación

Antes de la transformación, nuestro Señor me mostró cuánto peligro hay en el mundo y cómo Él no nos abandona. Me mostró cuántas veces estuvimos en grave peligro de disturbios, de ser controlados y de que la gente malvada quisiera comenzar una guerra. Sin embargo, cada vez, Él detendría este mal.

Entonces Nuestro Señor me mostró cuán cerca estamos del peligro del estallido de la guerra.

Mientras estaba frente a nuestro Señor, una imagen apareció detrás de Él, todas líneas garabateadas en papel, todas en diferentes direcciones. Este garabato representa todo el mal que se está planeando en el mundo.

Luego, sobre esta imagen, vi muchas imágenes de nuestro Señor, como imágenes sagradas. Esto significa que cada vez que ellos planeaban comenzar algún mal, nuestro Señor intercedía y detenía sus planes porque Él sabe lo peligroso que es para el mundo.

Jesús: «No sabéis lo cerca que habéis estado de la III [Locura] Mundial, y cada vez lo he detenido. Pero, ¿hasta cuándo podré seguir haciéndolo? Dile a la gente que se arrepienta y que rece».

Valentina: «Señor Jesús, gracias por detener esta guerra cada vez, pero la gente no te está suficientemente agradecida».

Nuestro Señor hablaba de la oración. Decía,

«Necesito oración. Necesito tu ayuda».

Nuestro Señor es verdaderamente un Dios hermoso. Hay que amarle. Debemos rezar por la gente que no le conoce y que le rechaza. Estar en Su Santa Presencia te hace sentir tan bien que no podrías pedir nada mejor. Te sientes seguro con nuestro Señor. Te sientes completo. Señor Jesús, te damos gracias por este hermoso mensaje de esperanza para la humanidad.”

Fuente: Valentina Sydney seer