
11 de abril del 2025 – Mensaje de la Santísima Virgen María a Luz de María
§1: Les llamo a regresar a Mi Divino Hijo, deseo que se salven
§2: En este momento la humanidad se encuentra dentro de un abismo
§3: Oren unos por otros
§1
“Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado: Los llevo en mi vientre materno para que no se pierdan.
Amados hijos: Les llamo a regresar a Mi Divino Hijo, deseo que se salven y que lleguen al conocimiento de la Verdad (I Tim. 2,4).
Vengo ante cada uno con Mi Corazón deseoso de encontrar la respuesta afirmativa, para que Me den la mano y así Yo pueda conducirles hacia la salvación del alma.
Mi Vientre Materno, Arca de Salvación, en este momento va a ser el refugio en donde se adentrarán quienes deseen abandonarse en Mí para llegar a Mi Divino Hijo.
Amados de Mi Divino Hijo, se encuentran en el tiempo de arrepentimiento, de Cuaresma y es cuando más pecados cometen. Mi Divino Hijo ha sido terriblemente ofendido por los corazones de piedra que no se han permitido ser moldeados.
Como Madre les llamo a enmendar sus obras y actos antes del Triduo Pascual para que se encuentren en estado de gracia, habiendo reconocido sus pecados y logrando un firme propósito de enmienda que nada ni nadie pueda llevar a cambiar. Es la salvación, la vida eterna hijos, la que acogen o desprecian (Jn. 10, 28-30).
Los corazones de piedra continúan cargando los restos nauseabundos del pecado contaminados de ira, soberbia, avaricia, lujuria, gula, envidia y pereza, enlodando con su necedad a sus hermanos, cayendo en un grave pecado.
§2
En este momento hijos de Mi Divino Hijo, la humanidad se encuentra dentro de un abismo, para salir necesitan poseer fe [1] como un grano de mostaza (Mt. 17,20).
No solo el que con su boca confiese a Mi Divino Hijo será digno de él, sino el que posea un corazón compasivo, humilde, misericordioso y con una fe inamovible.
Amados hijos, los llamo a mantenerse dentro del Amor de Mi Divino Hijo y no permitirse que sus pies se apresuren hacia el mal.
¡Detengan los pensamientos inicuos que llevan a Mis hijos a perder la paz! [2]
Como Madre de la humanidad los amo, deseo rescatarlos del mal cuando los miro frente a él sí Me lo permiten. Les hablo para que no caigan en el mal, aunque son tan necios y soberbios que continúan llevando a sus hermanos a caer en el pecado una y otra vez, siendo guiados por el orgullo y la soberbia dominados por el egoísmo.
Continúan pensando firmemente que nada de lo que la Casa Paterna les ha adelantado va a suceder y ¡se encuentran tan equivocados, hijos! Cuando suceda lo anunciado desearán no haber negado lo que Dios Padre permitió se les adelantara.
Amados hijos de Mi Divino Hijo, prepárense para que participen en paz de las celebraciones de la Semana Mayor y continúen el resto de la vida siendo criaturas íntegras.
Como hijos de Mi Divino Hijo están llamados a salvar el alma [3] y vivir dentro del amor y la fraternidad de los hijos de Dios Padre.
§3
La humanidad está en el abismo, ciega y sorda, detrás de los secuaces del mal quienes los llevan hacia grandes matanzas.
Oren hijos de Mi Divino Hijo, oren unos por otros.
Oren hijos de Mi Divino Hijo, oren, la tierra se estremece con fuerza, oren por [la Tierra del Águila], [el país con bandera de Hoja de Arce], [el país con capital Santiago del…], [aquel con capital Quito], [el otro con capital Bogotá].
Oren hijos de Mi Divino Hijo, oren por Japón, oren por [el país con capital Manila], oren por [el país con capital Ankara], el padecer llega.
Oren hijos de Mi Divino Hijo, oren por [el país con capital Antananarivo], es azotada por la naturaleza.
¡Atentos hijitos!, sean más del bien que del mal, sean fuertes y firmes en la fe. ¡Atentos, hijos!
Permanecen en Mi Corazón, los bendigo. Mamá María.”
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Comentario de Luz de María
“Hermanos, oremos:
«Madre mía, Mujer de fe, me llamas y no respondo, ante el bullicio del mundo que desea arrancarme de Tu lado para que no mire a Tu Divino Hijo.
Madre del Amor, Reina de mi vida, amparo mío y de todo pecador arrepentido, sé mi fortaleza ante las pruebas y mi faro en la noche oscura para que yo vea.
Madre de infinita piedad, me miras y sin palabras me hablas dentro del silencio de Tu Inmaculado Corazón, eres Reina y Madre, Puerta del Cielo, Vaso cristalino en donde nació el Amor de los Amores.
Siendo Madre de Dios eres el silencio que habla, la voz que predica sin hablar. Ven y enséñame a amar como Tú, en ese constante sí a la Voluntad de Dios.
Madre, Mujer de fe, deseo darte mi mano para que me guíes en todo momento. Enséñame la virtud del silencio, haz que mi corazón anhele la fraternidad y se goce siendo amor a semejanza de Tu Hijo.
Madre y Vaso Sagrado, de tus hijos no te olvides. Amén».
Hermanos, los invito a descargar el libro “Del Alma a Su Señor”, Oraciones y Meditaciones para Semana Santa, que contiene oraciones y meditaciones inéditas para cada día de la Semana Mayor, basadas en los Mensajes del Cielo: Descargar…
Fuente: Revelaciones Marianas