¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.29 de marzo del 2025 – Mensaje de San Miguel Arcángel a Luz de María
§1: Vengo a amparar al pueblo de Nuestro Rey y Señor Jesucristo
§2: Llegando la gran persecución
§3: Cada criatura humana sea cuidadosa en su obrar y actuar
§1
“hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo: vengo a ustedes por Voluntad de Dios. Vengo a amparar al pueblo de Nuestro Rey y Señor Jesucristo.
Mantengan la seguridad del amparo Materno. Nuestra Reina y Madre se mantiene ante Sus hijos para guiarles en el camino hacia Su Divino Hijo, si así ustedes se lo permiten (Jn. 2,5).
Mis Ejércitos Celestiales se encuentran junto a las criaturas humanas como nunca antes en la historia de la humanidad, brindándoles protección y guía en estos tiempos de tribulación (Dan. 12,1).
Este es el momento en el que se preguntan:
- ¿Cómo es que se nos advierte una y otra vez de cuanto vamos a padecer?
¡Nos mantenemos en angustia!
Y se preguntan:
- ¿Dios no nos va a socorrer cuando llegue el padecer, la adversidad?
- ¿Qué le han dado a Nuestro Rey y Señor Jesucristo como hijos suyos que son?
Hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, como Príncipe de las Legiones Celestiales, les llamo a reflexionar:
- ¿Qué fruto han dado como humanidad?
- ¿Fe, Esperanza, Caridad?
Los frutos de sus acciones han sido, lamentablemente, pecado, soberbia, debilidad, ofendiendo a Dios y rechazando cuanto les evoque a Él.
Es importantísimo para ustedes que reconsideren sus caminos y se esfuercen por producir frutos de verdadera Fe, Esperanza y Caridad en sus vidas.
§2
Llega el momento de las lamentaciones, las que llegarán a todos los países. Aunque la crisis puede suceder lejos de ustedes, siempre cargarán con las consecuencias de lo que sucede en otro lugar de la Tierra.
Es un tiempo de reflexión y preparación en el cual deben ser conscientes de los desafíos y adversidades que enfrentan.
Hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo:
- ¿Esperan que cuánto tienen ante sus ojos, no suceda?
Son necios, no han obedecido, no se disponen a la conversión.
Debo llamarles a que se preparen, primero espiritualmente.
Varios países son invadidos y el lamento es fuerte, profanan los templos y el Dolor Santísimo es escuchado por toda la Tierra [1], llegando la gran persecución de los hijos fieles a Nuestro Rey y Señor Jesucristo [2].
§3
¡Humanidad prepárate!
Abastézcanse con alimento y cuanto sea indispensable para cada uno, lo demás déjenlo en manos de la Trinidad Sacrosanta.
Cada criatura humana sea cuidadosa en su obrar y actuar. Han visto la luna teñirse de rojo y el sol oscurecerse, las aguas correr por las cuidades, la tierra agrietarse, los animales cambiar su comportamiento ante una humanidad que continúa enardecida en lo banal.
Oren hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, oren, es necesario para ustedes solicitar discernimiento [3] al Espíritu Santo en todo momento ante el acelerarse de la guerra.
Oren hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, oren para que los creyentes no se destruyan entre sí.
Oren hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo, oren, la Tierra se estremece con fuerza, como se estremecen las instituciones que el hombre ha creado.
- Es momento para que oren, hijos de Nuestro Rey y Señor Jesucristo…
- Es momento para que mediten…
- Es momento para que regresen al “camino, la verdad y la vida…” (Jn. 14, 6)
Reciban la Paz, que la humanidad necesita.
¿Quién como Dios? ¡Nadie como Dios!
«¿Quis Sicut Deus?»
San Miguel Arcángel.”
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Comentario de Luz de María
«Hermanos: San Miguel Arcángel nos llama a ser conscientes de este momento que nos lleva a vivir lo que nunca la humanidad ha vivido.
Nos alerta sobre la preparación espiritual y material ante lo que ya está viviendo parte de la humanidad y luego viviremos todos como parte de esta generación. Debemos estar atentos a los signos de los tiempos y fortalecer nuestra fe para enfrentar las adversidades que se avecinan. La oración y la conversión son esenciales en estos momentos. Oremos y apoyémonos mutuamente en nuestro camino hacia la Salvación.
Les compartimos algunos Mensajes del Cielo sobre la purificación que estamos viviendo:
8 de junio de 2010 – La Santísima Virgen María: “Esta su Madre, Peregrina de Amor, intercede por todos ustedes, cuando la tierra apresurará su caminar y el tiempo para el hombre se acortará más. Miren a lo alto, el Cielo les avisa. Miren cómo los animales cambian sus costumbres. Ellos sienten cuanto se acerca y les advierten, pero ustedes hijos, en medio de su vivir tan agitado, no se detienen a mirar lo que deben mirar.”
8 de diciembre de 2010 – La Santísima Virgen María: “Les invito a no tambalear. Aunque miren el sol oscurecerse, aunque miren la luna teñirse de sangre, aunque miren opacarse las estrellas, no tambaleen en la fe. Aunque miren las aguas levantarse sobre las tierras y crear con esto una nueva geografía, no teman, no tambaleen en la fe. Aunque miren venir la peste con enfermedades desconocidas ante las cuales la ciencia no podrá crear nuevas formas de detenerla, no tambaleen en la fe. Invóquenme: Ave María Purísima, sin pecado Concebida. Pero con fe como un grano de mostaza. Todo será alejado de ustedes y de sus familias, con fe.”
15 de enero de 2012 – Nuestro Señor Jesucristo: “Les he llamado a mirar a su alrededor, a mirar las señales de los tiempos, a mirar la conducta de los animales. Les invité a mirar con atención las estaciones climáticas y la variación de las mismas.
1 de marzo de 2017 – La Santísima Virgen María: “La Tierra gemirá y el agua de los mares le azotará, adentrándose en las costas de varias naciones, la energía nuclear es el Herodes de esta generación. La tierra vibra en uno y otro extremo. El Cielo nos ha detallado con anterioridad cómo los desastres naturales son signos de los últimos tiempos… son una reacción de la Creación que habla al hombre.”
18.03.2018 – Nuestro Señor Jesucristo: “No es necesario que levante Mi Mano para que esta generación sea purificada, ustedes se purificarán a sí mismos… Han utilizado parte de la ciencia para crear artefactos para destruirse a sí mismos, han utilizado la ciencia para la autodestrucción. Todos los gobernantes de las potencias del mundo conocen el destino de esta generación si un solo país hace uso del armamento nuclear.”
9 de abril de 2022 – San Miguel Arcángel: “Los desastres naturales actúan con mayor fuerza. Unos desastres son causa de la naturaleza, otros son ocasionados por el hombre que emplea la ciencia para el mal. El astro sol aumenta sus erupciones sofocando al hombre y a la misma Tierra que responde estremeciéndose.”
27 de enero de 2023 – La Santísima Virgen María: “Hijos, la naturaleza se hace presente con mayor fuerza; la criatura humana no se sentirá segura en ninguna parte.”
28 de agosto de 2023 – La Santísima Virgen María: “Amados hijos, en las profundidades de la Tierra, al rozar las placas tectónicas, unas más profundas que las que conocen, causan fuertes ruidos y hacen que los animales marinos salgan de donde viven en busca de salvación”.
Amén».
- Libro de Acontecimientos Finales, “Ya todo está dicho por Mi Casa”: descargar…
- Sobre la persecución de los cristianos: leer…
- Sobre el discernimiento: leer…
Fuente: Revelaciones Marianas
“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”
"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)" 
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)." 
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."