No permitiré que el hombre destruya lo que he creado

7 de agosto de 2023 - Mensaje de Dios Padre a Luz de María

“Amados hijos, como Padre Amoroso les Bendigo.

VELO EN ESPECIAL POR CADA UNA DE MIS CRIATURAS HUMANAS Y POR TODO LO QUE SALE DE MIS MANOS.

Yo Me gozo cuando obran y actúan en Mi Voluntad; desde el más pequeño de Mis hijos hasta el más sobresaliente de Mis hijos, se encuentra protegido por Mí.

Cada uno de ustedes mantiene Mi Protección. A todos les he dado el libre albedrío para que lo utilicen y elijan el bien, aun así, no lo han logrado por la soberbia o ignorancia.

Miro con dolor cómo no han llegado a comprender el Amor Infinito, la donación sin límites que han recibido de Mi Casa, enviando a Mi Hijo a morir por cada uno de ustedes.

La muerte no prevalece y Mi Hijo resucita a la vida eterna, eso deben tenerlo claro…

¡Resucita!, porque la Resurrección es el mayor signo de Poder Divino.

¡Jamás será vencida mi Divinidad!

No todos Me adoran y los pocos que Me adoran son incansables portadores de fe, a quienes perseguirán por predicar con la Verdad.

Han continuado con la locura de la muerte a manos de ustedes mismos; y será la criatura humana sin Mi Amparo, la que llegue a iniciar la mayor tragedia sembrando terror, atrocidades y genocidios hasta que Mi Mano les detenga con un fuerte castigo.

Me culpan de cuánto les sucede…

Me llaman cuando Me necesitan para solucionar sus problemas y Yo llego una y otra vez con Mi Infinita Misericordia, auxiliándoles, pero al salir de donde se encuentran sumergidos, se olvidan de Mí y es cuando les permito experimentar la soledad y la tristeza, para que enmienden la vida de pecado.

Llega el hambre espiritual y no saben saciarla debido a que caminan sin rumbo, a ciegas, sin pensar que el día puede ser el último de su vida.

Siguen tantas falsas ideologías, que, sin lograr amarme verdaderamente, se vuelven tibios y Me cuestionan luego de abandonarme.

La humanidad padece y padecerá, siendo la elección de lo que ustedes han permitido y desean: vivir por su propia cuenta. Les he permitido vivir a su manera, pero debo detener esta locura humana…

¡No permitiré que el hombre destruya lo que he creado!

Encontrándose los usurpadores de Mi Voluntad en la toma de decisiones, la humanidad vive insegura y opacada por el Demonio, que camina, respira y es acogido con grandes festines de pecado.

Mi Mano es tan suave que no la sienten, y a la vez ejecuta con veracidad Mis Designios, pero, ¡prepárense hijos Míos!, para que se salven por amor a Mí.

Permitiré que Mi Hija, María Santísima, aparezca en las Basílicas del mundo entero. Mis hijos se preocupan al saber que en sus pueblos no hay Basílicas, sino muy lejos de donde ellos moran. Olvidan pronto que donde hay fe y en donde Me adoran en espíritu y verdad como Padre de la Humanidad, Mi Amor realiza los más grandes milagros por Mi Amor a la humanidad.