¡Conviértanse, es urgente! “Yo no me canso mientras yo tenga vida, mientras Cristo me tenga con vida, voy a gritar, a gritar siempre: ¡Hermanos conviértanse! ¡Hermanos por favor conviértanse, es urgente! ¡No pierdan tiempo, es urgente! ¿Por qué? Porque muchos esperan grandes acontecimientos poco a poco. ¡No! ¡Los grandes acontecimientos se van a dar en pocos días! ¡Todos! Y vendrá el Aviso! [...] Confiemos en la palabra de Cristo, y pedimos el discernimiento al Espíritu Santo para no tomar decisiones equivocadas" –Luz de María.****
14 de octubre del 2024 – Mensaje de la Santísima Virgen María a Luz de María
§1: Están convocados a orar en este momento estremecedor
§2: El dolor recrudece. Les llamo a prepararse espiritualmente
§3: El amadísimo Ángel de Paz…

“Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado: Reciban Mi Bendición Materna, son Mis hijos amados, hijos de Mi Corazón Inmaculado.
§1
Están convocados a orar en este momento estremecedor para la humanidad. La oración del Santo Rosario es protección, auxilio, amparo y libertad para Mis hijos.

El Demonio teme a la oración del Santo Rosario y huye de horror, si Mis hijos se encuentran en debido estado espiritual.
Hijos, recuerden que deben mantenerse en estado de gracia, avanzando en la conversión personal.
Amados de Mi Corazón Inmaculado, cada momento es una oportunidad para que combatan el mal y salgan victoriosos.
Mi Divino Hijo es misericordioso, son ustedes hijos los que abusan de la Misericordia Divina (Heb. 4,16; Ef. 2,4-5; Tito 3,5).
Hijos, los instrumentos para dar a conocer la Voluntad Divina en este momento, son perseguidos por haber dado a conocer por adelantado los acontecimientos que viven y los que enfrentarán. La humanidad pende de un hilo, hijos de Mi Divino Hijo.
§2
La tierra ha sido amenazada por asteroides, meteoritos o cometas y otros objetos procedentes del espacio y el hombre los ha localizado [1]. Existe un asteroide que, sin esperarlo, aparecerá con trayectoria hacia la tierra: es el cuerpo celeste del Aviso [2].

Amados hijos, la guerra continúa, los enfrentamientos se suceden uno tras otro y los inocentes padecen. Llega el momento del dolor, de los lamentos, de la atrocidad ante el uso de la ciencia mal empleada en contra del mismo hombre.
Lo incontrolable de la guerra [3] va a llevar a la hambruna masiva [4]. Aparece la enfermedad en la piel [5] y se agrava tomando los órganos del cuerpo humano, saliendo la sangre del cuerpo hacia el exterior. Les llamo a poseer el Aceite Buen Samaritano y la caléndula [6].

Amados hijos de Mi Corazón Inmaculado, el dolor recrudece en toda la humanidad. Les llamo a prepararse espiritualmente y luego guarden alimentos, lo que cada uno pueda; si no logran guardar ningún alimento, los Ángeles del cielo les traerán “maná” para que sacien el hambre (Ex. 16,31; Jn. 6, 31).
§3
Amados hijos, el amadísimo Ángel de Paz [7] les mira en sus obras y actos, sufre al ver a Mi Divino Hijo con gran dolor por esta generación ingrata, sufre al sentir Mi Dolor por Mis hijos que no obedecen.
Nuestro amadísimo Ángel de Paz posee su familia, la que es perseguida por el Demonio. Nuestro amadísimo Ángel de Paz mantiene una estrecha relación con Mi Advocación de Nuestra Señora de Guadalupe.
Amados, no logran dimensionar a nuestro amadísimo Ángel de Paz que llegará a acompañarlos en los tiempos más difíciles.
- Amados hijos, la vida eterna deben merecerla, cada uno posee su encomienda dada por Dios y deben entregarla cumplida.
- Amados hijos de Mi Divino Hijo: Les exhorto a cumplir la Voluntad Divina y a ser obedientes en el cumplimiento de la Ley de Dios.
Como Madre les guío si Me lo permiten, les conduzco hacia Mi Divino Hijo.
Les bendigo, les amo. Mamá María.”
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Ave María Purísima,
sin pecado concebida
Comentario de Luz de María

“Hermanos: Estamos ante los eventos más fuertes para nosotros como hijos de Dios. Nuestra Madre Santísima me ha permitido mirar las consecuencias de la guerra, no solo la que se está dando en varias partes de la Tierra, sino de la batalla dentro de cada uno de nosotros al desear cumplir la Voluntad Divina contra el libre albedrío que nos quiere llevar hacia un camino diferente.
Hermanos, he visto la ciudad de [la Gran Manzana] destruida, puedo decir que irreconocible, realmente una escena dantesca.

A la vez he mirado el [país de los Samurái] casi ya bajo el agua y los constantes terremotos por todo el cinturón de fuego, sin dar tregua, arriban a la humanidad.

Hermanos, miré a Estados Unidos siendo precavido para no ser arrastrado hacia la guerra que terminará con el uso de la energía nuclear. Vi como en Medio Oriente arden lugares en donde hay petróleo y junto a esto la muerte; y cómo la hambruna en las criaturas humanas es saciada por los Ángeles de Dios, por eso debemos mantener la fe, porque no estamos solos.
Hermanos, como hoy nos dice Nuestra Madre Santísima liberémonos de todo mal y oremos para esperar al Ángel de Paz, a quien la Trinidad Sacrosanta envía a auxiliar a la humanidad en los momentos más fuertes de la batalla.
Hermanos, continuemos orando en este momento, sabiendo que la oración es el alimento que fortalece al espíritu y nos mantiene firmes en la fe. Amén.”
- Sobre peligro de asteroides: leer…
- Sobre la guerra: leer…
- Sobre el Aviso: leer…
- Sobre la hambruna: leer…
- Sobre la enfermedad: leer…
- Sobre el Aceite del Buen Samaritano y las plantas medicinales: leer…
- Sobre el Ángel de Paz: leer…
Fuente: Revelaciones Marianas








“Si supierais cómo resplandecéis después de acercaros debidamente al Sacramento de la Confesión. (Jesús) está en el Confesionario y escucha cada palabra, ve en cada rincón de vuestro corazón y está deseoso de otorgar las gracias inherentes a Su Perdón.
“¡Os pido Mis hijos predilectos que paréis esta abominación! ¡No más ministros extraordinarios de la Eucaristía! ¡No más comuniones distribuidas por laicos, ni más comuniones en la mano!”



"Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Santísima Madre de Dios, María, Protectora de la Fe, resguarda mi fe en el refugio de Tu Inmaculado Corazón. En él, protege mi fe de cualquier merodeador. Muéstrame las amenazas a mi fe y ayúdame a vencerlas. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)"
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)."
"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha; sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el divino poder a Satanás y a los demás espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas. Amén"
Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo. Padre amoroso del pobre; don, en tus dones espléndido; luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo. Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo; tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta los duelos. Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento. Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma al espíritu indómito, guía al que tuerce el sendero. Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera avuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén."