MENSAJE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO A SU AMADA HIJA LUZ DE MARÍA
11 DE SEPTIEMBRE DEL 2019
Oren por España e Italia, graves conflictos reverdecen
"Amado Pueblo Mío:
MI MISERICORDIA SE DERRAMA CONSTANTEMENTE SOBRE QUIENES SE MANTIENEN ATENTOS A CUMPLIR COMO VERDADEROS HIJOS MÍOS Y SOBRE QUIENES ENMIENDAN SU VIVIR Y RETOMAN MI CAMINO.
No existen dobleces en Mis hijos, conocen Mi Ley y en el Corazón de Mi Pueblo debe prevalecer el AMOR DIVINO HACIA SUS HERMANOS, manteniendo el corazón libre de toda aspereza que impida el fluir constante de la relación con nuestra Voluntad.
Cuando en la criatura humana no fluye MI AMOR por todos sus hermanos, esa criatura es causa de dolor para Mí, ya que no pueden mantenerse en constante comunión con Mi Casa ni dentro de la Comunión de los Santos, debido a que los detentes les mantienen entre el ya y el todavía no.
La humanidad se encuentra en medio de la oscuridad y la Luz de Mi Amor, siendo un peligro inminente en quienes no poseen una FE firme y libre del ego humano. El Demonio ataca a Mi hijos en donde conoce que les hiere más para así susurrarles al oído que se alejen de Mí, y de esta forma los lleva a perderse.
Amado Pueblo Mío, ante un instante definitivo en la historia de la humanidad y por ende en la historia personal de vida, la respuesta tiene que ser una: OBEDIENCIA (Jn 14,23).
ASÍ TIENE QUE OBRAR Y ACTUAR MI PUEBLO, NO A MEDIAS SINO SIENDO EN TOTAL OBEDIENCIA, CUMPLIDORES DE MI VOLUNTAD.
No creen en las Revelaciones dadas por Mi Madre, por San Miguel Arcángel y por Mí, de lo contrario, ya habrían cambiado el obrar y actuar. Esperan que el tiempo transcurra sin proponerse enmendar la vida, ignorando que el tiempo es potestad Divina y no del hombre, y aquel que espera para acogerse a Mi Misericordia, no debe esperar a mañana para convertirse, sino lo debe efectuar en este mismo instante.
No pueden continuar en la tibieza, en la inmisericordia, en la envidia, en la poca o nada de caridad que mantienen unos hacia otros. Mantienen esperanza en Mi Amor, en Mi Misericordia sin realizar un cambio definitivo, sin esforzarse por ser mejores ¡YA! Son tibios que desean transitar Mi Camino, sin desapegarse de su ego humano cuando esté saturado de la inmundicia que les mantiene en el fango.
Buscan en todo lo que contenga agua para saciar la sed, pero no toman del AGUA VIVA DE MI SAGRADO CORAZÓN (Cfr. Jn 7,37), se resisten a la conversión total, manteniendo el corazón cubierto por la soberbia de la que se desprenden todos los males.
Mi Pueblo tiene que preguntarse a sí mismo cuánto Amor existe en su corazón, cuánto odio, resentimiento, cuánto egoísmo, cuánta disposición a ser MI MISMO AMOR con todo lo que implica. La tibieza no es buena compañera, envenena el organismo espiritual llevándole a la presunción, a la arrogancia, a los detentes que interfieren entre la criatura humana y Mi Voluntad, apegándose al error.
Pueblo Mío:
ESTE INSTANTE ES DE EXPIACIÓN PARA QUIENES DESEEN ACERCARSE A MÍ. ES INSTANTE DE ARREPENTIMIENTO, DE CONVERSIÓN, YA QUE ANTE EL VENENO DE SATANÁS, ES URGENTE QUE SE MANTENGAN FUERTES Y FIRMES EN LA FE, DE LO CONTRARIO SERÁ MAYOR EL LAMENTO, CUANDO NO LOGREN SALIR DE LAS GARRAS DE SATANÁS.
Mi Pueblo se encuentra infestado de egolatría, de sordera, de ceguera que únicamente lo ha atraído a mantenerse hacia donde Satanás les indica, siendo invadidos cada día por nuevos demonios que les inculcan nuevos errores, nuevas desobediencias, nuevas negaciones al MANDATO DEL AMOR A MI PADRE POR SOBRE TODAS LAS COSAS Y AL PRÓJIMO (Cfr Mc 12,28-30), de lo que se desprenden cada instante nuevas negaciones a Mi Palabra, a Mis Pedidos, a Mis Sacramentos hasta llegar a disfrutar del libertinaje que Satanás le ha ofrecido al hombre para alejarle de Mí.
Mi Iglesia es también infestada por nuevos errores para alejarles del Centro de Nuestra Trinidad Sacrosanta y que acojan novedades que no son Voluntad de Nuestra Trinidad Sacrosanta, sino de hombres que abusando del poder, han trazado líneas en dirección opuesta a Mi Querer.
La maldad de la criatura humana emerge golpeando a todos los hombres. Los mares desatan nuevas y desconocidas fuerzas sobre la humanidad, la naturaleza golpea severamente a la criatura humana por haber sido oprimida, el aire se contamina y Mis hijos padecen. El estremecerse de la Tierra se intensifica y la fuerza de los volcanes es causa de admiración para la humanidad.
La constante exposición de la Tierra a los embates solares, ha adelantado el ciclo de la Tierra y los días se acortan para que el hombre posea menor tiempo para pecar, quien se crea justo verá su maldad en apogeo y el justo se contaminará con el pecado que le presenta Satanás, por ello Mi Llamado constante a la conversión total, no a la tibieza que trasluce la mayoría, sino a la verdadera conversión en donde la criatura humana permanece alimentándose de Mi Santo Espíritu y no de sí misma.
Grandes eventos surgirán en la atmósfera causados por la influencia del Sol. La enfermedad azota al hombre ante la carestía de fidelidad, la sociedad es una fuente donde pululan los enemigos del alma por el vacío espiritual en que viven.
LES LLAMO A LA UNIDAD, A SER FIELES Y VERDADEROS, A NO VENDER MI PALABRA PARA QUE NO SEA ABORTADA POR LOS HIPÓCRITAS.
Apéguense a la Sagrada Escritura para que no caminen a tientas (Jn 5,39; I Tim 4,3), sino a paso firme siendo en este instante, necesarias las Obras de Misericordia (Mt 25,31-46) para que ejerciten el Amor, la caridad, la bondad, en estos instantes en que la humanidad está por recibir grandes castigos como nunca antes los ha recibido:
“EL HOMBRE ATRAE SU PROPIO CASTIGO”.
Oren hijos Míos, oren por España e Italia, graves conflictos reverdecen y Mis hijos se sumergen en el caos total.
Oren hijos Míos, oren, el comunismo con su lento transitar posee poder a su antojo y enviará su armamento...
Oren hijos Míos, oren, Bolivia, México, Centroamérica, Estados Unidos se estremecen con fuerza.
Las lluvias aumentarán en niveles impensables, donde la sequía permanece, los alimentos escasean.
Argentina, esta nación amada, padece. Consagren esta Nación al Inmaculado Corazón de MI MADRE Y A MI SAGRADO CORAZÓN, PARA QUE LA ANGUSTIA NO LES LLEVE A PADECER EN DEMASÍA.
Amado Pueblo Mío, no pierdan la fe, continúen fieles a Nuestra Trinidad Sacrosanta y amen a Mi Madre, Mi Ángel de Paz llegará a ser consuelo para Mi Pueblo y conocerán Mi Poder y Soberanía sobre todo lo Creado.
Son Mis hijos, les urjo a serme fieles.
MI COSTADO ABIERTO LES HA DADO A LUZ Y DEBEN RETORNAR A ÉL.
Mi bendición y Mi Amor sobre Mi Pueblo al que amo con amor eterno.
Su Jesús."
AVE MARÍA PURÍSIMA SIN PECADO CONCEBIDA
AVE MARÍA PURÍSIMA SIN PECADO CONCEBIDA
AVE MARÍA PURÍSIMA SIN PECADO CONCEBIDA
(1) Profecías sobre Argentina...
(2) Revelaciones sobre el Ángel de Paz...
Fuente: Revelaciones Marianas
Orad por la Iglesia, sus Jerarquías, los consagrados válidamente ordenados, durante este tiempo de confusión y apostasía. No caigáis en la trampa de la división, ni siquiera con aparentes buenas razones. Volved la mirada a la vida de los santos, como San Martín de Porres y San Padre Pío de Pietrelcina, el primero discriminado y el segundo combatido por la misma institución. Que sus comportamientos en la adversidad sea un ejemplo...
“La Iglesia es la Casa de Dios. Está prohibido que los hombres entren aquí con los brazos desnudos y usando pantalones cortos. Está prohibido que las mujeres entren con los pantalones cortos, con los vestidos cortos, de cuello bajo o sin mangas."
"¡Padres de familia, enderezad el rumbo de vuestros hogares!, dialogad mucho con vuestros hijos; sacad tiempo para escucharlos, porque muchos hogares se están perdiendo por la falta de amor, diálogo, comprensión y ante todo por la ausencia de Dios. Volved a llevar a Dios a vuestros hogares, rezad mi Santo Rosario, porque familia que reza unida, permanece unida."
31 de Enero del 2022 "Padre Celestial, hoy rindo mi corazón a Ti. Ayúdame a ser Tu instrumento en el mundo. Cúbreme con la Preciosa Sangre de Tu Divino Hijo. Protégeme de todo mal. Protégeme de cualquier plan maligno que Satanás pueda tener para mí el día de hoy. Revísteme de Tu Divina Voluntad. Amén"
"Oh, Corazones de Jesús y de María; me consagro, consagro mi familia y al mundo entero, a vuestros Amantísimos Corazones. Atended a la súplica que os hago y aceptad nuestros corazones en los Vuestros, para que seamos librados y protegidos nosotros y el mundo entero de toda maldad y de todo pecado. Que la protección de vuestros Dos Corazones, sean refugio, fortaleza y amparo, en las luchas espirituales de cada día. Que el poder de vuestros Dos Corazones, irradie al mundo para que sea protegido de la maldad y el pecado. Nos consagramos voluntariamente y consagramos a la humanidad entera a vuestros Corazones; seguros y confiados por vuestra Gran Misericordia, de obtener la victoria sobre las fuerzas del mal en este mundo, y la Gloria Eterna en el Reino de Dios. Amén"
"Me coloco en la presencia de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y por el poder de la Sangre de nuestro Señor Jesucristo, rompo, desbarato, pisoteo, aniquilo e invalido y cancelo de mi ser físico, síquico, biológico y espiritual, toda maldición que haya sido puesta sobre mí, sobre mi familia y árbol genealógico, por cualquier persona, familiar o antepasado por medio del ocultismo o espiritismo. Por el poder de la Sangre Preciosa de Nuestro Señor Jesucristo y por la intercesión de la Santísima Virgen María, San Miguel, San Gabriel, y San Rafael, rompo e invalido toda maldición, cualquiera que sea su naturaleza en el nombre de nuestro Señor Jesucristo. Amén (Repetir 3 veces la oración)" 
"Oh Jesús de la Divina Misericordia, escucha mis súplicas hacia Ti, pues estoy aquí para hacer tu voluntad."
"Oh Glorioso Patriarca San José, Padre adoptivo de Jesús y Esposo Humilde y Casto de María; poderoso intercesor de las almas y guardián Fiel de la Iglesia; acudimos a vos, amado Padre, para que te dignes ampáranos y socorrednos en la lucha espiritual contra los enemigos de nuestra alma. Ven en nuestro auxilio y por tu humildad y pureza, líbranos de todo mal. San José terror de los demonios, venid en mi auxilio (3 veces)." 
"Oh Espada Gloriosa dada a Miguel Arcángel, por el Padre Eterno, del empíreo celeste! Espada Gloriosa: combate todo espíritu ruin en nuestras familias, en nuestra mente y en nuestro corazón. Gloriosa Espada de San Miguel Arcángel, coloca este signo victorioso sobre mi mano derecha para dar la victoria final y poder vencer todo espíritu destructor que quiera alejarme de la Gracia Santificante. Ven Gloriosa Espada de San Miguel, relampaguea con un rayo del Santo Espíritu, para poder ver el rostro de nuestro Padre Amado Celestial y ser digno de las promesas de mi Señor Jesucristo. Amén"
Dulcísimo Jesús, Redentor del género humano, míranos humildemente postrados ante tu altar. Somos tuyos, y tuyos queremos ser; pero, para estar más seguramente unidos a Ti, he aquí que cada uno de nosotros se consagra hoy libremente a tu Sacratísimo Corazón. Muchos, en efecto, nunca te han conocido; muchos también, despreciando tus preceptos, te han rechazado. Apiádate de todos ellos, Jesús misericordioso, y atráelos a tu sagrado Corazón. Sé Rey, Señor, no sólo de los fieles que nunca te han abandonado, sino también de los hijos pródigos que te han abandonado; haz que vuelvan pronto a la casa de tu Padre para que no mueran de miseria y de hambre. Sé Tú Rey de los que se engañan con opiniones erróneas, o a los que la discordia mantiene alejados, y llámalos de nuevo al puerto de la verdad y a la unidad de la fe, para que haya un solo rebaño y un solo Pastor. Sé el Rey de todos los que todavía están envueltos en las tinieblas de la idolatría o del islamismo, y no te niegues a atraerlos a la luz y al reino de Dios. Vuelve tus ojos de misericordia hacia los hijos de la raza, que en otro tiempo fueron tu pueblo elegido: desde antaño hicieron descender sobre ellos la Sangre del Salvador; que ahora descienda sobre ellos una fuente de redención y de vida. Concede, Señor, a tu Iglesia la seguridad de la libertad y la inmunidad de los daños; da la paz y el orden a todas las naciones, y haz que la tierra resuene de polo a polo con un solo grito: "Alabado sea el Corazón divino que obró nuestra salvación; a él sea la gloria y el honor por siempre". Amén.